La Iglesia Católica diseña una campaña contra la ley del casamiento entre homosexuales que se presentará en forma inminente ante el Congreso de Paraguay, tras el triunfo de esta corriente en el parlamento argentino esta semana, informaron fuentes eclesiásticas este viernes."Vamos a hacer una intensa campaña de educación en los valores cristianos, para evitar que la ley de unión entre personas del mismo sexo que se sancionó en la Argentina llegue al Paraguay", dijo el secretario general de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP), Monseñor Adalberto Martínez.
El obispo admitió que la ley ya tiene vigencia en nueve países del mundo. "Con el fenómeno de la globalización y la tiranía de la relativización de los valores morales, no estamos exentos de tener este tipo de reclamos en el parlamento", subrayó.
Recordó que la Iglesia sólo aprueba la unión sacramental del hombre y la mujer, "porque la Biblia dice que el hombre dejará su hogar para unirse a su mujer".
Monseñor Martínez reiteró que los fundamentos bíblicos son categóricos, y agregó que la unión entre un hombre y una mujer también es la fuente de la procreación de los hijos, de educarlos y transmitirles la fe.
La organización Somos Gay anunció, en cambio, que "muy pronto tendremos el matrimonio legal entre homosexuales en Paraguay".
"Estamos trabajando hace mucho tiempo en este proyecto de ley", agregó un comunicado que celebró la sanción de la normativa en la Argentina.
Gustavo Benítez, de la organización "Paraguay, Unión e Igualdad", señaló a periodistas que la aprobación de la legislación "es un gran paso en la lucha por la igualdad de los derechos humanos".
Benítez dijo que su organización no insistirá "por el momento" en acelerar una ley ante el congreso de Paraguay. "Son necesarias leyes previas, como una ordenanza municipal que penalice la discriminación de los gays".
Aseguró que en Paraguay, el 10% de la población es homosexual. "Es una cifra considerable", puntualizó."Ese porcentaje debe ser respetado, y lucharemos para lograrlo", concluyó.
El obispo admitió que la ley ya tiene vigencia en nueve países del mundo. "Con el fenómeno de la globalización y la tiranía de la relativización de los valores morales, no estamos exentos de tener este tipo de reclamos en el parlamento", subrayó.
Recordó que la Iglesia sólo aprueba la unión sacramental del hombre y la mujer, "porque la Biblia dice que el hombre dejará su hogar para unirse a su mujer".
Monseñor Martínez reiteró que los fundamentos bíblicos son categóricos, y agregó que la unión entre un hombre y una mujer también es la fuente de la procreación de los hijos, de educarlos y transmitirles la fe.
La organización Somos Gay anunció, en cambio, que "muy pronto tendremos el matrimonio legal entre homosexuales en Paraguay".
"Estamos trabajando hace mucho tiempo en este proyecto de ley", agregó un comunicado que celebró la sanción de la normativa en la Argentina.
Gustavo Benítez, de la organización "Paraguay, Unión e Igualdad", señaló a periodistas que la aprobación de la legislación "es un gran paso en la lucha por la igualdad de los derechos humanos".
Benítez dijo que su organización no insistirá "por el momento" en acelerar una ley ante el congreso de Paraguay. "Son necesarias leyes previas, como una ordenanza municipal que penalice la discriminación de los gays".
Aseguró que en Paraguay, el 10% de la población es homosexual. "Es una cifra considerable", puntualizó."Ese porcentaje debe ser respetado, y lucharemos para lograrlo", concluyó.