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Juan Carlos Ojeda, hincha y exjugador del auriazul en la década del 80, regresaba a su asiento para observar el segundo tiempo entre local y Sol de América cuando pisó una baldoza y esta terminó cediendo, según su relato a radio ABC Cardinal.
Para fortuna del mencionado, solo resultó con lesiones en la pierna izquierda y fue asistido por personal de la Policía Nacional. Para el exfutbolista se trató de una desgracia con suerte, teniendo en cuenta que ocurrió en la parte más alta de la preferencia y el hombre no cayó al vacío.
“Dios me dio una oportunidad para seguir viendo fútbol, fue un susto grande y espero que lo reparen para que no le pase a otro”, afirmó Ojeda.
Consultado acerca de la posibilidad de denunciar el hecho, Ojeda enfatizó que su cariño a la institución está por arriba de todo y no hará denuncia alguna, porque el club le dio la oportunidad de jugar al fútbol y actualmente su hijo también juega en la institución luqueña.
Dijo además que espera reunirse con los dirigentes en el transcurso de la presente semana para lo referente a la atención médica de sus heridas.
Con el incidente ocurrido en el recinto luqueño, viene a la memoria el derrumbe en el Defensores del Chaco, ocurrido en 2009 durante un campeonato nacional de Interligas. En el derrumbe fallecieron dos agentes antimotines y varios resultaron con lesiones por el desmoronamiento de un sector de las preferencias.