Cargando...
El viceministro de Administración Financiera de Hacienda, Ramón Ramírez, dijo que por ahora todas las transferencias de recursos a la UNA están paradas porque la entidad no comunicó aún quién es el nuevo ordenador de gastos, tras la renuncia de Froilán Peralta como rector.
Explicó que de ser el rector interino -Ricardo Meyer- el ordenador, pedirán un dictamen a la Abogacía del Tesoro para determinar si corresponde efectuar la operación. Ya esta mañana, Meyer había informado que Hacienda no reconoce su firma, por lo que algunos pagos quedaron parados, hasta tanto se resuelva quién finalmente asumirá por designación de una asamblea.
Meyer había expresado su preocupación por la posibilidad de que esta paralización persista y termine afectando a toda la institución, a medida que transcurra el tiempo. “Hoy tenemos tres unidades académicas (donde hay retrasos en los pagos); dentro de 15 días será problema de toda la universidad que no se pueda cobrar”, advirtió.
Ramírez puntualizó que los salarios de setiembre fueron pagados antes del cambio de rector, pero abrió la posibilidad de que podría haber contratados que no cobraron todavía debido a que posiblemente no fueron incluidos en ese grupo, informó el periodista de ABC Roberto Espínola.
La situación mencionada se generó cuando el 25 de setiembre pasado Froilán Peralta renunció al cargo para posteriormente entregarse a la justicia, tras permanecer prófugo por el escándalo de corrupción en la Universidad Nacional, donde los estudiantes se organizaron para una vigilia y reclamaron su salida.
Ante la ausencia de Froilán, quien quedó preso en la Penitenciaría de Tacumbú, el entonces vicerrector Andrés Amarilla asumió el comando de la UNA por unos días, hasta que presentó igualmente renuncia ante la serie de protestas. Finalmente, el 29 de setiembre, el Consejo Superior Universitario nombró a Ricardo Meyer como nuevo rector interino.
La asunción de Meyer como ordenador de gastos en la institución de altos estudios generó críticas, debido a su condición de candidato a la intendencia de Asunción. En respuesta, el político aseguró que ocupará el puesto de manera temporal y se negó a renunciar a su postulación en las elecciones de municipales.
Posteriormente, se convocó a una asamblea general para designar al rector definitivo e intentar acabar con el clima de incertidumbre en la universidad. La reunión debía desarrollarse a las 08:30 de hoy, pero los estudiantes presentaron una acción judicial para frenarla, ya que consideran apresurada la eventual designación de un nuevo rector y plantean que la misma se haga recién en noviembre.
Ante este panorama, Ricardo Meyer convocó a una reunión urgente del Consejo Superior Universitario para adelantar su renuncia y materializarla entre hoy y mañana. “Quiero dar el paso al costado para que una persona que produzca menos ruido pueda ocupar este espacio”, manifestó esta mañana al referirse a las críticas que generó su designación. En caso de que Meyer presente su dimisión y aún no se pueda celebrar la asamblea, el Consejo Superior Universitario deberá designar a un decano como ordenador de gastos de manera interina.