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Lucía Duarte de Garcete, esposa del comandante de las Fuerzas Militares (FF.MM.), Gral. Luis Gonzaga Garcete, se ha dedicado en las últimas horas a asegurar de manera insistente que no utiliza las estructuras castrenses para dar soporte a una ONG que dirige y que tampoco tiene a personal militar trabajando para fines particulares.
Con estas declaraciones, “La Generala” intenta desacreditar las publicaciones que viene realizando desde hace semanas el diario ABC Color sobre una serie de irregularidades cometidas en filas castrenses y en las que ella se ha visto directamente involucrada. Duarte de Garcete insiste en sus declaraciones; sin embargo, existen pruebas que refutan todas sus afirmaciones. Por ejemplo, una fotografía tomada un día antes de que ABC Color iniciara las publicaciones el 28 de junio pasado muestra cómo un efectivo militar acompañaba una reunión de las mujeres que forman parte de la ONG de “La Generala”.
La imagen, captada el 27 de junio pasado, muestra a las mujeres que conforman la ONG denomina Fundación Nuestra Señora de la Asunción (Funsa) reunidas en un salón del quinto piso del edificio de las Fuerzas Militares y al efectivo militar sentado, al fondo del lugar, esperando a que finalizara el encuentro. En esa oportunidad, de acuerdo a fuentes a las que tuvo acceso ABC Color, Duarte de Garcete junto a las demás estaban celebrando los cumpleaños del mes.
Como si eso no fuera suficiente, la esposa del alto mando militar sigue planillenando en la institución castrense, puesto que se dedica a recorrer programas de televisión para intentar desmentir las publicaciones en horario laboral y cuando debería estar cumpliendo como funcionaria de las FF.MM. Duarte de Garcete argumenta que su trabajo consiste en realizar asistencia técnica y que no debe cumplir horario; sin embargo, durante el seguimiento realizado por un equipo de investigación de este diario, fue encontrada varias veces en su fundación en pleno horario de trabajo. De hecho, fue vista y fotografiada haciendo asistencia en su fundación en horario laboral.
Lucía Duarte de Garcete, esposa del comandante de las Fuerzas Militares (FF.MM.), Gral. Luis Gonzaga Garcete Espínola, aparece con una particular metodología de cobrar salario público sin asistir al lugar designado y además dedicarse a la actividad privada, con todas las facilidades a su disposición dentro de la misma institución donde figura como subordinada.
La esposa de la máxima autoridad militar, mano derecha del presidente Horacio Cartes en defensa de la seguridad, percibe un salario mensual de G. 3.500.000. Figura como auxiliar administrativo del Comando del Ejército, pero en realidad se dedica a la “asistencia social” a través de una organización privada que ella misma preside. Como si fuera poco, la “bondadosa” funcionaria pública que sale a “ayudar” con su Fundación privada mientras cobra un sueldo del Estado dispone de la estructura de las Fuerzas Armadas (FF.AA.) para sus actividades sociales.
La primera dama militar contaba con una oficina dentro de las FF.MM., donde opera su organización privada integrada por “esposas” de militares. La Fundación se denomina Nuestra Señora de la Asunción (Funsa) y se dedica a la “asistencia en salud y educación a los integrantes de las FF.AA. y a la comunidad civil”, según explicó la misma. La organización es privada pero utiliza recursos públicos en sus “asistencias”, con la venia del comandante de las FF.MM., a la vez esposo de la administradora de la Fundación.
Duarte moviliza funcionarios militares, camiones, ómnibus, para las asistencias que realiza su Fundación. En su cuenta de Facebook ostenta las ayudas de su organización utilizando militares, cuando la función de los mismos es velar por la seguridad. En su Fundación trabajan de secretarias dos funcionarias militares con sueldo del Estado: la teniente Sandra Karina Cárdenas, que cobra un salario base de G. 3.465.705, y la sargento Andrea Estela Martínez, quien percibe una remuneración básica de G. 2.919.488. Ambas fueron encontradas en la ONG cuando ABC accedió a la entrevista con la presidenta.
Tras las publicaciones de ABC Color y luego de serios cuestionamientos, el ministro de Defensa, Diógenes Martínez, decidió ordenar el desalojo de la fundación de las oficinas de Fuerzas Militares.