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La audiencia ante el juez de Garantías Leonardo Ledezma está agendada para las 08:15 y se desarrollará en el Palacio de Justicia de San Lorenzo, reportó la corresponsal de ABC Antonia Delvalle.
El magistrado deberá decidir sobre la solicitud del Ministerio Público de disponer la prisión preventiva de María del Carmen Martínez Méndez, jefa del Departamento de Talento Humano, además de Luz Aquino y Leticia Deggeller, estas últimas funcionarias de la misma dependencia.
Las tres mujeres fueron imputadas ayer por los delitos de hurto agravado y frustración de la persecución penal, luego de ser sorprendidas tratando de sustraer documentos del Rectorado, en un supuesto intento de “quema de archivos”, según denunciaron los estudiantes de la Universidad Nacional de Asunción, quienes debieron intervenir y presionar para lograr la detención de las sospechosas.
La primera en ser descubierta fue la propia directora de Talento Humano, quien fue interceptada la noche del jueves por los universitarios cuando intentaba abandonar la UNA a bordo de una patrulla de seguridad privada. Los alumnos rodearon la camioneta y requirieron la presencia de la fiscala Blanca Aquino, quien demoró cuatro horas en llegar al lugar y, una vez presente demostró una actitud “medio cómplice”, según denunciaron los manifestantes.
Finalmente, ante la protesta y presión, la agente debió disponer la remisión de Martínez Méndez hasta la comisaría 1ª de San Lorenzo, donde se realizó una revisión y se confirmó que efectivamente la mujer ocultó entre sus ropas varios documentos sacados del Rectorado, además de pendrives.
Horas después, la mañana del viernes, un equipo fiscal ingresó a las oficinas del Rectorado, donde sorprendió a Luz Aquino y Leticia Deggeller, quienes pasaron la noche en el lugar al verse descubiertas y acorraladas por los estudiantes. Las mismas aseguraron que llegaron al lugar solo para liquidación del salario del personal, argumento que no convenció a los investigadores, considerando que se trataba de un día feriado y la actitud furtiva, en altas horas de la noche.
Los estudiantes que protestan desde hace días en la UNA, donde permanecen en vigilia, jugaron un papel protagónico para que estas tres funcionarias sean detenidas e imputadas en un aparente intento de hacer desaparecer evidencias que puedan empeorar el escándalo de corrupción en la institución, donde el principal salpicado es el rector Froilán Peralta, quien ayer renunció y se entregó a la Justicia luego de permanecer desaparecido por casi una semana.