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Hay varios factores que inciden negativamente en la lucha de la FTC contra los criminales del EPP, explicó a ABC Color el mayor Alfredo Ramírez, vocero de la Fuerza de Tarea Conjunta. Citó, por ejemplo, a los clanes familiares que colaboran con el EPP y están "camuflados" en la sociedad, así como la presunción que tienen de que agentes de la fuerza pública filtran informaciones y el hecho de que el terreno donde actúa el EPP es muy grande, afirmó.
Dijo que hubo operativos en que llegaron a campamentos cuando el agua en ollas estaba hirviendo aún, lo que les da la pauta de que llegan con 20 ó 30 minutos de retraso y hace que presuman filtraciones. Dijo que es posible que haya habido y así como que siga habiendo y hay instancias que se encargan de investigar esto.
Sobre el terreno, dijo que es un área de más de 15.000 kilómetros y que siempre atacan en lugares privados. “Nosotros no podemos predecir cuándo ni dónde va a ocurrir; el área es muy grande”, señaló en contacto con ABC Televisión. Sin embargo, el EPP atacó anoche a solo un kilómetro de donde secuestró al menonita Abrahán Fehr, es decir, en un minúsculo cuadro. Se puede apreciar también mediante las fotografías que el lugar no es un monte, sino que son kilómetros de descampado donde se cultiva.
Al ser consultado sobre el millonario gasto mensual que implica la FTC, unos G. 3.200 millones al mes, Ramírez refirió que ese presupuesto es bajísimo, que debe ser el presupuesto más bajo de la región para este tipo de lucha. Dijo que probablemente "solo los africanos cuesten más barato" que el presupuesto para la lucha contra el EPP.
“Es el menor costo operativo que una fuerza de esta característica puede tener y estoy casi seguro que a nivel regional somos el menor y a nivel mundial, seguramente los africanos lo que cuestan menos que nosotros”, dijo.