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La empresa transportadora Cristal Esteño SA no existe en Ciudad del Este como figura en los documentos públicos, confirmó el fiscal Aldo Cantero, quien está a cargo del caso contrabando de oro. Indicó que su colega del este del país fue hasta la dirección donde debería estar la firma, pero no encontró nada.
En el allanamiento realizado en la tarde de este viernes en el Hotel Dazzler de Asunción, la comitiva fiscal policial detuvo a un hombre de nacionalidad dominicana, Manuel Portes Medina, quien tenía varios documentos relacionados a la venta de oro.
Además, encontraron documentos que vinculan a José Salazar Tinajero, ciudadano mexicano que figura como dueño de los casi 500 lingotes de cobre y oro, -quien además aparece como propietario de la empresa Samano SA-, con un ciudadano de nombre Carlos Gustavo O’Higgings, representante de la empresa importadora Allianz SA.
Un contrato hallado en el lugar hace referencia al servicio de exportación de oro, entre la empresa Allianz SA y Samano SA. La primera firma se compromete a controlar el correcto embarque del objeto a ser transportado, además de las gestiones legales para el embargue del mismo, hasta el destino final que sería Hong Kong (China). Como testigo entre ambas personas aparece Manuel Portes Medina.
Entre las documentaciones también aparece el nombre de Audelio Acosta, un hombre dedicado a la prospección de oro en Poso Yobai, departamento de Guairá, de donde se tiene minas de oro que están bajo el control del Viceministerio de Minas y Energías.
“Los contratos se hacían a espaldas de Minas y Energías”, aseguró el fiscal Cantero, en conversación con medios de prensa.
En lo que respecta a Portes Medina, éste tenía una tarjeta de presentación en la que decía que contaba con una oficina en el edificio del World Trade Center de Asunción, lo que se comprobó que es mentira. “Usaban las habitaciones de este hotel (Dazzler) como oficina para los trámites”, acotó.
Añadió que Portes Medina será imputado en las próximas horas y se libró orden de captura para más personas que aparecen en los documentos hallados este viernes, unas cinco, precisó el agente del Ministerio Público.
De acuerdo con Cantero, las evidencias halladas hoy dan cuenta de la existencia de toda una red que operaba en el contrabando de materiales preciosos, como el oro, e incluso tráfico de droga, atendiendo el cargamento de papel con cocaína confiscado este viernes en el aeropuerto Guaraní de Minga Guazú, que tenía como destino Turquía y que debía ser enviada por la empresa Cristal Esteño SA. Esta firma, como lo indicó el fiscal, es una firma “fantasma”.
Hasta el momento, cuatro personas fueron detenidas e imputadas por el caso del contrabando de presunto oro. Un despachante de Aduanas paraguayo, de nombre Ricardo Castro, el empresario mexicano José Salazar Tinajero; Didier Marc André, ciudadano belga de 52 años, y Ricardo Castro Vera, paraguayo, de 53.
Gregorio González, propietario de la transportadora Cristal Esteño SA, se encuentra prófugo y forma parte de las cinco personas buscadas por el Ministerio Público.