Cargando...
Según el capitán Rafael Valdez, presidente del directorio del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay (CBVP) la desvinculación de cuatro voluntarios de la institución nada tiene que ver con el proceso abierto en su contra por el Ministerio Público. Negó que haya habido persecución contra estas personas.
Una resolución con fecha de ayer del Tribunal de Justicia de la institución resuelve “expulsar con degradación (…) a Capitán Mayor Emigdio Benítez, Capitán Mayor César Manuel Manchini Céspedes, BVC Gustavo Humberto Céspedes, BVC Carlos Daniel Lezcano Torres, capital mayor BVC Cristhian Fernando Tabares Ocampos”. En otro punto, se da de baja por 24 meses a “BVC Diego Arnaldo Vivero Irazusta, BVC Guido Marcelo López Rodríguez, Capitán BVC Jimmy Enhart, Tte BVC Rodrigo David Rojas y BVC José Virgilio Rivas Mendoza”.
En cuanto a los motivos, se argumenta que durante la manifestación estas personas lanzaron improperios contra los miembros del directorio durante una reunión que realizaban e incluso hicieron el uso de la fuerza.
“No tiene nada que ver una cosa con la otra; el sumario se inició antes de la imputación de la Fiscalía”, alegó el presidente en diálogo con ABC Color. Agregó incluso que los afectados están aún a tiempo de apelar ante el directorio la resolución emitida por el Tribunal, para presentar sus pruebas.
Dijo que, según está informado, la destitución se dio por el empleo de violencia durante la manifestación llevada a cabo por voluntarios meses atrás y por utilizar bienes de la institución como radios y móviles en dicha ocasión.
Valdez habló además de la imputación que pesa en su contra y en la de otros miembros del directorio, entre ellos: Luciano Florenciáñez (secretario), Mario Gini (tesorero), Daniel Rivas (excomandante), Elías Ramírez (excomandante), Julio Maíz (exsíndico) y Ramón Grange (exsíndico).
Dijo que en principio fueron más de diez acusaciones, de las cuales corrieron sólo dos ante el Ministerio Público. Se trata de una ambulancia que fue donada de G. 98.400.000 y la supuesta falsificación de un presupuesto, de G. 900.000.000.
Alegó que orquestaron “una campaña bien montada” ya que este grupo de personas quiso se postuló para el directorio, sin éxito. Dijeron que incluso algunos medios de comunicación se prestaron para dicho fin, sin darles a ellos (los del directorio) oportunidad de defenderse. “Pero estamos en el baile y estamos seguros de que vamos a salir bien parados”.