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Para el edil, resulta llamativo que la Fiscalía se haya tomado tanto tiempo para llamar a declarar a los fiscales involucrados, quienes fueron citados como testigos pero deben ser -a su criterio- llamados a declarar en forma indagatoria, ya que los audios dejan al descubierto indicios de hechos punibles.
“Me parece una burla a la ciudadanía la lentitud de la reacción del Ministerio Público”, dijo a ABC Cardinal el concejal capitalino, ya que afirma que con la primera tanda de audios se debió lacrar las oficinas de los principales involucrados e incautar sus teléfonos. “Cuanto más tiempo se pierde en esto, uno está cada vez más lejos de la verdad”, aseveró.
Arregui además critica a los fiscales que llevan adelante las investigaciones, pues solo se centran en el tráfico de influencias pero ignoran otros hechos punibles, como el cohecho pasivo y el enriquecimiento ilícito.
Hay una intención deliberada por parte del fiscal general del Estado de poner "paños fríos”, para no llegar al trasfondo de la cuestión, refiere. “Yo digo que es un simulacro de investigación y una farsa; esto está dirigido por Javier Díaz Verón”, exclamó el edil y enfatizó que éste debe dar un paso al costado; caso contrario, seguirá dañando la institución del Ministerio Público.
Si bien señala que los audios no constituyen pruebas por sí mismas, por la ilegalidad con que fueron obtenidos, sí dejan al descubierto serios indicios de varios hechos punibles que pueden conducir a los investigadores a obtener pruebas contundentes.
“Tenemos que estar atentos. Son la ciudadanía y los medios los que pueden forzar a que esto se haga de forma seria. Yo no recuerdo un caso de corrupción tan grande como este”, concluyó.