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Los estudiantes en vigilia, que piden la renuncia de Torales Kennedy, quien inclusive ya está imputado por varias irregularidades relacionadas a la administración de la facultad, llegaron hasta el rectorado de la Unca para manifestarse durante la reunión del Consejo Superior Univesitario, que trataría la destitución del cuestionado decano.
Para ello, los alumnos tuvieron que dejar el “campamento” montado en la sede de la Facultad de Ciencias de la Producción, que está a cien metros del rectorado. En ese lapso, los jóvenes que apoyan al decano desmontaron las carpas y “limpiaron” el lugar, porque querían dar clases, dijeron.
Los estudiantes en vigilia, molestos, regresaron a la facultad para impedir que se desmantele el campamento, y entonces se produjo el intercambio de palabras, que llegó a golpes. Dos estudiantes resultaron lastimados, informó la corresponsal de ABC Color, Carmen Colmán. Los heridos son Dernis Cantero y Betina Santacruz.
Inmediatamente llegaron los cascos azules y separaron a los grupos, y el enfrentamiento no pasó a mayores. Los que piden la renuncia del decano, que pertenecen a las filiales de la Unca, fueron de nuevo al rectorado para seguir esperando la sesión del Consejo, que todavía no se inició.
El ambiente en estos momentos es tenso. Según los estudiantes de las filiales, los que apoyan al decano vinieron “preparados” con guantes y piedras.
Ayer, se dio a conocer la imputación contra el cuestionado decano. Sin embargo, en lugar de pedirle que se apartara del cargo, el Consejo Directivo de la facultad decidió en una sesión extraordinaria realizada anoche, dar permiso a Torales Kennedy.
De acuerdo a lo que se desprende del documento, el permiso es por tiempo indefinido pues se establece que es durante el lapso que tome el proceso de investigación. Además, el Consejo Directivo decidió ordenar el restablecimiento de las actividades académicas y administrativas de la Facultad, que llevan paralizadas varias semanas.
El decano fue imputado por presunto cobro ilegal de matrículas, cursos y otros. El fiscal Alcides Espínola también acusó al tesorero de la facultad, Teófilo Burgos, como autor del hecho. Según el acta de imputación, el hecho punible de exacción del cual se lo acusa se vendría cometiendo en forma sistemática desde 2013 en la facultad.