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El agente, que prefirió no identificarse, se comunicó con Radio Cardinal para expresar lo ocurrido en el establecimiento Campo Morombi en Curuguaty.
“La orden era hablar y no disparar, y se vieron fotografías apuntándole a mi jefe directamente al pecho”, relató el hombre, quien se comunicó desde Alto Paraná, y además recalcó que “nosotros teníamos la orden de no disparar”.
“Hay grabaciones en las que se le escucha a mi jefe diciendo que solo balines de goma y gases lacrimógenos”, dijo al tiempo de señalar que “el subcomisario nos dijo que si había un disparo, replegarse, cubrirse y defenderse, lógicamente, porque el primer disparo que ocurrió fue al pecho del comisario Lovera, que no falleció al instante, pero luego sí, luego cayó el subjefe y luego el suboficial Rojas, y así sucesivamente hasta los seis y más de ocho heridos”, indicó.
Por otro lado, el uniformado lamentó que ningún oficial superior ni autoridad haya conversado con los agentes de la GEO durante el fin de semana. A esto sumó la queja del escaso armamento que poseen para llevar a cabo los trabajos de campo.
“Con poca estructura, armamento, proyectiles, se está haciendo un trabajo de 99% efectivo”, dijo y cuestionó el por qué no se les entregan los equipos adquiridos que están “en cajas” en la FOPE.
“Conste que con la precariedad que nos manejamos, armas buenas, están en la FOPE, guardadas en cajas, en la armería central, ¿por qué no se envía a la GEO de Ciudad del Este, Oviedo, de Encarnación, de Pedro Juan? Por oficiales superiores de arriba inútiles, oficinistas que se enfrían las pelotas en el aire acondicionado (sic)”, enfatizó.
El agente también señaló que ese viernes utilizaron chalecos tácticos y que los mismos no brindan suficiente protección a los policías.
“Ya no les esperamos más, pedimos que los superiores doten a la GEO y otras unidades”, finalizó.