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Hoy no se observa el ambiente festivo en la estancia San Francisco en comparación con años anteriores. Hoy la tristeza y la impotencia rodean a la familia Urbieta, en el primer cumpleaños sin don Félix, retenido desde octubre de 2016 por el grupo criminal EPP. Familiares y amigos se reunieron para celebrar una misa y exigir la liberación.
En medio de las lágrimas, Ermelinda Agüero, esposa del ganadero, asegura que aún están lejos de llegar a la suma requerida por los criminales, para lograr la liberación. Hasta el momento llevan juntados 150.000 dólares de los 350.000 exigidos por el EPP. “Hoy no tenemos cómo cumplir; apenas juntamos ese dinero, y nos falta mucho”, dijo la mujer.
La esposa agregó que ese dinero está disponible para la entrega immediata y apeló a la buena voluntad de los captores a fin de lograr la ansiada liberación de Urbieta. “Esperamos esa comunicación donde nos digan que aceptan el dinero”, agregó.
La última comunicación de los secuestradores con la familia data de inicio del mes de febrero, donde le comunican el monto a cambio de la liberación, que en aquel entonces no se alcanzó.
Además de Urbieta, permanecen en poder del grupo criminal el suboficial de policía Edelio Morínigo, los menonitas Abrahán Fehr y Franz Wiebe. Este martes se dio a conocer una nueva prueba de vida de este último, en la que los criminales exigen el reparto de víveres a comunidades indígenas, con la promesa de que la liberación se daría en cinco días.