Cargando...
Mañana es 1 de agosto, y el carrulim no puede faltar en los hogares de los seguidores fieles de las tradiciones paraguayas. La mezcla básica consiste en caña, ruda y limón, que en esta fecha se puede observar en cada puesto de venta de remedios yuyos, principalmente en el Mercado N° 4.
Según la tradición, transmitida de manera oral a lo largo de los años, esta pócima casera sirve para espantar las energías negativas o, como algunos dirían, la mala onda, y, a la vez, purificar la sangre. Sin embargo, no es necesario tomar toda una botella; solo basta con unos tragos en ayunas. Los más rigurosos dicen que deben ser siete. Ni más ni menos.
Con el tiempo, esta costumbre se ha afianzado tanto en la mente de los paraguayos que en cualquier parte, inclusive en los lugares de trabajo, las personas preparen el brebaje para la dosis de rigor, a pesar de contener alcohol.
Muchos beben carrulim porque creen fielmente que es eficaz; otros lo hacen por la tradición, por “probar” o, simplemente, para prevenir, “en caso de que sea cierto”, puesto que agosto suele ser un mes difícil.