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Así lo confirmó a ABC Color, el presidente del IPS, Benigno López, como resultado de una investigación interna de la previsional, derivada de la investigación de nuestro medio, que constató que en pleno horario laboral, “Perlita” priorizaba su cuidado personal, yendo a la peluquería, mientras los asegurados pasaban penurias aguardando consultar.
Además de esta grave irregularidad, Paredes atendía en la clínica Nanawa sin haber terminado su especialización. La mujer se recibió en 2010 en la UniNorte, tras haber estudiado 3 años en Cuba. Ya en el 2012 fue nombrada en el IPS. Si se cumpliera con el requisito, recién en el 2015 tendría que empezar a hacer consultorio como clínica médica.
A través del lazo familiar, Perlita accedió a un horario privilegiado dentro del IPS, atendiendo solo tres veces por semana, con un salario por arriba de los G 5.000.000. Además de percibir unos de G. 10.300.000 al mes en la Cámara de Diputados, por prestar servicios tres veces a la semana en el dispensario médico.
En 2014 fue condenada por producción indebida de certificados sobre méritos y servicios y uso de certificado sobre méritos y servicios de contenido falso en carácter de autora y expedición de certificados sobre méritos y servicios de contenido falso en carácter de instigadora.
La Justicia comprobó que percibía cinco salarios del Estado. La hija de la diputada evitó la prisión y debió devolver unos G. 400.000.000 y prestar dos años de trabajo comunitario.