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Tareas de inteligencia de varios meses y una operación encubierta internacional denominada “Libertadores II”, realizada entre la SENAD, el Ministerio Público, la Aduana de Paraguay, la Coordinación Administrativa de Investigación Aduanera (CAIA), la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) y la Policía de la Provincia de Mendoza, Argentina permitieron desarticular una estructura criminal internacional que remesaba grandes cantidades de marihuana desde Paraguay a Chile. Siete personas, entre paraguayos y chilenos, fueron detenidas, además de la incautación de una carga de marihuana y varios vehículos.
Las tareas de inteligencia desarrolladas por la Unidad de Investigación Sensible (SIU) de la SENAD, en coordinación con autoridades chilenas y argentinas, tuvieron su fase operativa a partir del pasado 18 de agosto con la autorización del Juez Penal de Garantías, Gustavo Amarilla Arnica, para la realización del operativo encubierto y entrega vigilada en todo el territorio del Paraguay, bajo la dirección del Fiscal Antidroga Marcelo Pecci.
De esa forma, mediante la coordinación con la Brigada Metropolitana/Oficina de Operaciones Internacionales de la PDI de Chile y policías de la Provincia de Mendoza, Argentina, se pudo infiltrar en una estructura criminal para identificar y dar seguimiento a la negociación, entrega y transporte de una carga de marihuana, proveniente de Paraguay, cuyo transporte se dio por territorio argentino hasta llegar a Chile.
Todo este proceso permitió identificar el “modus operandi” de la organización y a sus principales componentes. De esa forma, tanto las autoridades chilenas y paraguayas obtuvieron las evidencias necesarias para la captura de los mismos en sus respectivas jurisdicciones.
En Paraguay, los agentes especiales de la SENAD, bajo la dirección del fiscal Pecci, realizaron un allanamiento el pasado 3 de setiembre en la localidad de San Antonio, departamento Central. En dicho lugar, detuvieron a tres miembros de la organización criminal identificados como: Víctor Manuel Rojas Cañete, paraguayo, de 26 años, sin antecedentes; Rosana Rojas Cañete, paraguaya, de 29 años, quien había sido detenida con anterioridad en Chile por tráfico de drogas y expulsada de dicho país en marzo de este año; y Héctor Molinas Cañete, paraguayo, de 31 años, sin antecedentes.
Así también, durante este allanamiento, la comitiva se incautó de un vehículo Toyota Corolla de color azul, un vehículo Toyota Runx, de color dorado, equipos informáticos, teléfonos celulares y 2 Millones 500 Mil guaraníes en efectivo. La orden de allanamiento fue avalada por el Juez Oscar Anibal Delgado López.
Por otro lado, en forma simultánea, en fecha 3 de setiembre, la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) realizó un procedimiento a la altura del Kilómetro 53, Ruta General San Martin, camino a Los Libertadores, Comuna de los Andes, Chile. En el lugar fueron detenidas tres personas de nacionalidad chilena, que transportaban la carga de marihuana proveniente de Paraguay en dos vehículos. Se trata de Luis Danilo Pizarro Fredes, quien fue el encargado de venir a Paraguay para concretar la transacción ilícita unos días antes de su captura, Sebastián Ángelo Berrios Puchi y Danilo Vicente Fredes Acuña. Los antidrogas chilenos se incautaron de un alijo de 218 kilos 500 gramos de marihuana, además de un vehículo de la marca Citroen C5 negro y un vehículo Chevrolet Optra gris. El cargamento tiene un valor superior a los 300 mil dólares americanos en dicho mercado.
Finalmente, en fecha 4 de setiembre, la PDI (Chile) logró capturar al líder paraguayo de la organización, quien se había trasladado al país trasandino para efectuar el cobro por la remesa de droga. Se trata de Lucrecio Benítez Zaracho, paraguayo, de 46 años, oriundo de San Patricio, Misiones, Paraguay. El mismo fue detenido en el Paso Fronterizo de Horcones entre Argentina y Chile. Con ello, toda la estructura establecida tanto en Chile como en Paraguay quedó prácticamente desarticulada, aunque aún están siendo investigados otros colaboradores de menor peso en ambos países. Cabe resaltar el apoyo de la Aduana paraguaya y la Policía de la Provincia de Mendoza, quienes facilitaron el seguimiento y la identificación de la ruta utilizada por esta organización criminal en los tres países mencionados.