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El monseñor Livieres retomó el conflicto iniciado el pasado 4 de junio, cuando participaba de una marcha en Ciudad del Este, donde aseguraba que el arzobispo de la capital, Pastor Cuquejo, casi había sido expulsado de la iglesia por denuncias de homosexualidad.
En una entrevista concedida al canal “La Tele”, Livieres dijo que “le parece mal, pero en cierto modo me parece bien que una persona tenga pecados, fallas, nadie es impecable, pero él (Cuquejo) cometió un delito, porque cometió homosexualidad demostrada”
Prosiguió con su descargo, diciendo que Cuquejo es “una persona tan peligrosa de ser atacada por ese tema y justo fue a meter el dedo en la llaga, lo acuso de homosexualidad a Carlos Urrutigoity", a quien señala como “un hombre de vida intachable”.
El bochornoso conflicto entre ambos representantes de la iglesia católica, se desató a raíz de que el obispo de Asunción solicitó la reapertura de una investigación contra el sacerdote argentino Urrutigoity, en torno a denuncias de pedofilia y homosexualidad.
PRUEBAS DE SU HOMOSEXUALIDAD
Livieres dijo de forma contundente que existen pruebas de la tendencia homosexual de Cuquejo. “Las pruebas son concluyentes porque coincidían todas las denuncias en que eran verdad y eran personas veraces. Determinantes porque no terminaron de firmar las denuncias”, explicó.
Sobre este punto, detalló que los testigos fueron ahuyentados para que no terminaran de rubricar la denuncia contra Cuquejo. “La madre de la persona afectada intervino, pidió que no firme el hijo, y quedaron las cosas así, este señor ahora es médico y anda por ahí curando a la gente”, sostuvo, refiriéndose a la supuesta víctima del obispo de Asunción.
“Para mí, el monseñor Cuquejo es homosexual, para mí siempre lo fue, pero no solamente para mí, sino como para unas 20 mil personas en Asunción. No es que sea un descubrimiento mío, sino que es un descubrimiento de muchísima gente que lo trata, que lo conoce”.
Refirió además que conoce muchos más detalles en contra de Cuquejo, pero que no las dirá por el momento. “No me parece razonable, el me tira una piedra, yo le tiro una piedra”.
Sostuvo que al intervenir en el caso de Urrutigoity “se metió en mi diócesis, así que se metió contra mí; dejó a la Santa Sede como idiota, porque la Santa Sede terminó la investigación en el 2002 y dijo que no había más y se acabó”.
El prelado dijo no temer a una posible querella por difamación por sus explosivas declaraciones. “Va a salir perdiendo él (Cuquejo) porque tengo muchos más detalles”.
Explicó además que la Santa Sede debería intervenir en el caso del Mons. Cuquejo “Yo creo que él debe ser llamado a vivir como lo han hecho con viejos así que se portaron mal, en el silencio de la oración, preparando su buena muerte (…) Que se calle y que desaparezca”.
LOS HIJOS DEL EXPRESIDENTE
Livieres también habló sobre la polémica desatada con el expresidente Fernando Lugo y sus hijos, aclarando que esto era de su conocimiento. “Sabíamos perfectamente y además sabíamos que el hijo por el cual él se fue, no es ninguno de los que apareció en diarios ni que reconoció, así que hay otro hijo por ahí”.
Rememoró que ese primer hijo fue lo que motivó a la Santa Sede a pedir su alejamiento, en julio del año 2004.