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Elías Cabral, corresponsal de Última Hora en la zona de Curuguaty, donde la semana pasada asesinaron a Pablo Medina, también está siendo amenazado de muerte por la mafia y abiertamente por el exdiputado y actual concejal de Curuguaty, Julio Colmán.
La Policía esperó casi una una semana tras el mortal atentado contra un comunicador para decidir ponerle custodio al periodista Cabral. La zona se volvió muy insegura para los trabajadores de la prensa, debido a la presencia de muchos gatilleros a sueldo al servicio de los narcotraficantes.
“A pedido de los colegas, desde hoy me asignaron custodia policial, para poder moverme acá en Curuguaty”, dijo Cabral a ABC Color.
Sobre su pelea con Julio Colmán, señaló que nunca tuvo enfrentamiento con el político, solo que el concejal se enojo por publicaciones periodísticas sobre malos usos de fondos para la educación.
Cabral viene realizando denuncias sobre hechos delictivos en la región y se ganó la enemistad de muchas personas poderosas ligadas a la delincuencia y a la política. Julio Colmán, la semana pasada, se ratificó públicamente en sus amenazas contra el corresponsal tratándolo de “cucarachita” y “bandido de cuarta”. También dijo que no se olvidaba de Elías y que le iba a cobrar todo lo que le hizo.