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El ingeniero Fabián Cáceres, director de planificación de la ANDE, informó sobre las medidas a corto plazo para medir el impacto del siniestro, atendiendo a que la institución no tiene intención de mudar el denominado cementerio de transformadores, sino simplemente una verificación de los elementos guardados en el mencionado depósito.
“Vamos a mantener aislada la zona del accidente; se depositó arena lavada encima de los residuos líquidos y luego tenemos que colocarlos en tambores y derivarlos al depósito ubicado en un lugar cerrado por recomendación de la Secretaría del Ambiente”, detalló el funcionario con comunicación con Radio Canal 100.
De igual manera, se hizo un talud de arena que tiene como propósito impedir que las aguas corran hacia otros lugares en caso de lluvias. “Nada se va a retirar de allí y los que entren al depósito tienen que portar un traje especial”, debido a que en el depósito ya se encuentran algunos transformadores que contienen el aceite askarel.
Consultado sobre los niveles de contaminación, el directivo se excusó de responder aludiendo no ser especialista en la materia; no obstante, dijo que solo el contacto directo o el consumo en gran cantidad pueden ocasionar daños al organismo “y eso no ocurrió con nadie, nos reunimos con los bomberos y algunos tuvieron malestar mas que nada por el humo”.