“Complicidad política” en contrabando

El contrabando de cigarrillos detectado ayer en un puerto clandestino en Salto del Guairá se realizaba sin rubor alguno, relató el ministro de la Senad, Arnaldo Giuzzio, quien considera evidente que hubo “complicidad política”.

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Era una cosa impresionante. De la inteligencia anterior demostraban una abierta (operatividad), pero indudablemente bajo la complicidad de todo el mundo. Todo el mundo sabía”, indicó el ministro de la Senad y relató una situación que fue hasta burlesca para ellos, ya que cuando fueron previamente a hacer las labores de inteligencia en el lugar ingresaron identificados como agentes de la Senad y los contrabandistas no tuvieron ningún temor, ya que consideraban que “solo” contrabandeaban cigarrillos.

En los depósitos se encontraron cargamentos de cigarrillos de la marca Eigth y San Marino, producidos por Tabacalera del Este, parte del Grupo Cartes, que pertenece al expresidente Horacio Cartes.

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“Nuestros agentes de inteligencia, cuando hicieron el procedimiento, no es que se fueron encubiertos, sino que se fueron entrando con el logotipo de Senad. 'Ah, estos son Senad nomás' (dijeron los contrabandistas). Revisaron si había droga en las cajas y salieron, como si nada, fue hasta chistoso; estaba a la vista de todos”, relató Giuzzio.

No obstante, el ministro indicó que ellos toman con seriedad este tema, ya que evidencia que había connivencia de las autoridades incluso a nivel político. "Yo no creo en las coincidencias. Acá hay que ser bien claros: acá había complicidad política para que todo eso se permita, y no solamente eso, la complicidad política en el crimen", dijo Giuzzio y agregó que, si bien por ahora no hay pruebas, ya que la investigación primero tiene que dar con los responsables de la carga, cree que con el trabajo del Ministerio Público "van a ir saltando en los próximos días".

Canindeyú es un departamento donde la diputada cartista Cristina Villalba tiene bastante influencia, incluso en la Policía, a tal punto que es apodada "La madrina".

El puerto clandestino no era nada improvisado, sino que incluso tenía un enorme depósito en el que guardaban 17 embarcaciones que presumiblemente usaban para el contrabando. El operativo en Canindeyú estuvo encabezado por la Unidad Interinstitucional para la Prevención, Combate y Represión del Contrabando (UIC), a cargo del exfiscal Emilio Fúster, quien solicitó la colaboración de la Senad, Aduanas, la Policía y la Fiscalía.

Giuzzio dijo confiar en la labor que ahora estará a cargo de los fiscales del caso, no solo para dar con los responsables de la carga, sino llegar al origen de la cadena de comercialización ilegal.

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