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Primeramente, negó haber amenazado al fiscal Marcelo Pecci. Dijo que dejaba todo "en manos de Dios" y luego arremetió contra el ministro Francisco de Vargas y el titular de la Senad, Luis Rojas, para después insistir en cuanto a su inocencia. Aseguró que es un "ganadero" y que también está en el negocio de los combustibles.
“Así no se hacen las cosas; imaginate, el fiscal me agarró y después me imputó. Yo no tengo nada, es una injusticia lo que se hace conmigo. Yo soy un ganadero y vendo combustible; cuando salga voy a mostrar que soy inocente”, dijo Carlos Sánchez. “No tengo fortuna, si era bandido como dicen no iba a tener 45.000 votos; la gente me quiere. Los bandidos de guantes blancos son Francisco de Vargas y Luis Rojas”, arremetió. Luego, negó haber dado dinero a los dos ministros e insistió que no es un bandido.
Ofuscado, “Chicharô” dijo que al salir de esta situación se irá del país, ya que no hay seguridad para él, puesto que es la segunda vez que lo detienen y que la primera salió limpio. Ahora volverá a demostrar -según dijo- que no tiene la fortuna que -dicen- le pertenece.
Chicharõ fue detenido en las últimas horas del viernes pasado, en las cercanías del Shopping del Sol, donde se encontraba en compañía del diputado Marcial Lezcano. Luego de su aprehensión, el diputado suplente acusado de lavado de dinero permanecía en la base de la Senad, desde donde hoy fue trasladado al Departamento Judicial y de ahí -finalmente- a Tacumbú.