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Nidia López, directora del Consejo Municipal de Emergencias y Desastres (Comueda), reafirmó que el cauce hídrico llegó hoy a los 7,09 metros, con lo que la cifra de damnificados trepó a 54.670 personas.
Del número total, 8.234 afectados se encuentran en los 88 refugios habilitados por la comuna capitalina conjuntamente con la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN). Los 2.700 restantes corresponden a personas que decidieron refugiarse en casas de amigos o familiares u optaron por algún alquiler, según detalló.
La funcionaria mencionó que existe temor a que se llegue al nivel de crecida del año pasado, cuando el récord fue de 7,38 metros, en el mes de julio. “Esa vez llegamos a 7,38 metros y tuvimos 17.000 familias damnificadas; hoy estamos con 7,09 metros y estamos con 10.945 familias damnificadas”, manifestó para luego estimar que “vamos a llegar lo mismo más o menos”.
Indicó que hasta ahora hay fondos para continuar con la asistencia, gracias a que el gobierno central dispuso una ampliación presupuestaria. “Cada familia tiene un costo de G. 1.200.000, incluidos el alquiler, baño, materiales, frazadas, colchones y víveres”, refirió.
Sobre la queja de los vecinos en torno a las plazas ocupadas por los damnificados, López recordó que se revocaron las medidas que prohibían la ocupación de espacios públicos, considerando la situación de emergencia de miles de familias desplazadas por las aguas.
La funcionaria reconoció que los contribuyentes tienen derecho a exigir la protección de los espacios de recreación. “El que tributa tiene derecho a reclamar que no le molesten en sus veredas, con los ruidos; pero, por otra parte, hay gente en extrema pobreza y se debe negociar”, refirió.
La directora del Comueda valoró la actitud de varios ciudadanos, quienes finalmente optan por adoptar una actitud solidaria con los afectados por las crecidas. “En el 90%, la gente se vuelve solidaria con ellos”, sostuvo. Reconoció nuevamente la necesidad de que el gobierno central y los municipios articulen acciones tendientes a “soluciones definitivas” ante las periódicas inundaciones.