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Corto en expresiones, el expresidente del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) aseveró que se siente “seguro” de que la imputación “no tiene ningún fundamento y carece de rigor técnico”.
A su vez, repudió el hecho de que la fiscala de su caso, Susy Riquelme, no haya considerado cuestiones que para él son fundamentales. Según dijo, no se tuvo en cuenta un análisis detallado del origen de sus bienes.
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Reclamó que pidió que se hiciera una pericia contable para determinar técnicamente si corresponde o no el hecho por el que se le imputa.
“Solicité hace tres meses que se haga una pericia. La fiscala lamentablemente desconoció ese pedido de pericias y sacó esta imputación con ausencia de rigor jurídico. Espero que la justicia se ponga los pantalones y realmente sea justa”, aseveró Cárdenas.
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Recordemos que Justo Cárdenas fue imputado por la fiscala Natalia Fúster, al igual que sus tres hijos, por no poder justificar G. 2.600 millones y otros movimientos millonarios.
La fiscala de Delitos Económicos y Anticorrupción Natalia Fúster Careaga había sido recusada un día después de imputar, ordenar la detención y pedir la prisión preventiva de Justo Pastor Cárdenas Nunes, extitular del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert). Es por eso que otra fiscala tomó su caso.
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Conforme a un cuadro comparativo, entre 2008 y 2018, Cárdenas tuvo un ingreso de G. 5.364.894.000 y egresos de G. 8.009.595.082, por lo que no estaría en condiciones de justificar la diferencia.
Asimismo, Cárdenas registró un egreso total de G. 1.731.722.052 en concepto de compra de inmuebles, ya sea de forma directa, a nombre de sus hijos o a través de empresas de las cuales él es socio mayoritario.
Según la Fiscalía, también utilizó a sus hijos y a sus empresas para la compra de millonarias acciones, costosos inmuebles y lujosos vehículos por G. 8.009.595.082.