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Luis Rojas, titular de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), fue abordado sobre el resultado del gran operativo del sábado último en Amambay, donde se incautaron 500 kilos de cocaína y se logró detener a cuatro personas: el exagente de Policía Sixto González Godoy (40), Andrés Zárate, Narcisa Ortellado Morel y Orlando Machuca Morel, todos oriundos de Pedro Juan Caballero.
La intervención se realizó en Karapã’i, donde los agentes lograron ubicar a los narcos en el preciso momento en que descargaban la droga de una avioneta. Al percatarse de la situación, los criminales efectuaron disparos, por lo que se inició un tiroteo, tras lo cual logró huir el piloto, Ramón Donato Mendoza Riquelme.
Sobre Mendoza Riquelme, Rojas mencionó que se trata de un “piloto muy querido” por los narcos, debido a su actitud temeraria. Comentó que el hombre operaba a escasos 2.000 metros de un puesto policial en la zona. “Operaba en el límite de la carga de seguridad”, sostuvo, en contacto con Canal 100.
El piloto logró levantar vuelo en medio del enfrentamiento en Karapã’i y fue a aterrizar en Pedro Juan Caballero, donde abandonó la aeronave para continuar su huida. La avioneta es un Cessna con matrícula ZP-BBU, aunque la misma correspondería a otra aeronave, según indicó Rojas en la fecha. El titular de la Senad reconoció que la misma “puede pertenecer a alguien con vinculaciones políticas que incluso la usaba para transportes legales”.
Por otra parte, fue abordado sobre la fotografía en que el piloto fugitivo aparece junto al también narcopiloto Carlos Mendieta y el diputado suplente de la ANR Carlos Sánchez, alias “Chicharõ”, quien había sido detenido por lavado de dinero y es acusado en el Brasil de ser integrante de una red de narcotraficantes. “Tal vez sean amigos nomás”, ironizó Rojas al hacer referencia a la cercanía de los narcopilotos con el político.
Rojas explicó posteriormente que no puede explayarse sobre este punto debido a que no posee suficientes pruebas para acusar. En otro momento, indicó que “uno de estos patrones (del narcotráfico) conoce bastante a la Senad; tiene muchos amigos ahí”. El ministro de la Senad fue más allá y aseguró que diariamente le toca convivir en la Secretaría con agentes vinculados a narcopolíticos. “Cada día uno debe ver rostros de gente que responde a patrones del narcotráfico”, sostuvo.
Apuntó que en la institución hay importantes nexos con el narcotráfico y con políticos que a su vez tienen vínculos con estas bandas. “Muchos son importantes por el volumen de droga que manejan (las redes para las que trabajan) y hay varios que son importantes por sus vínculos con políticos”, arremetió. Aclaró que no puede remover a estas personas sospechosas de la Senad debido a la falta de pruebas.
El diputado suplente Carlos Sánchez es señalado como uno de los grandes narcopolíticos en Paraguay. “Chicharõ” es, según la Policía y la Senad, el principal operador local de la red internacional dirigida por Luis Carlos Da Rocha, alias “Cabeza Branca”, el “pez gordo” más buscado de la región.
El “defendido” de los diputados colorados Freddy D’Ecclesiis y Marcial Lezcano -quienes incluso lo visitaban en prisión- posee dos condenas en el Brasil, además de antecedentes por tráfico de drogas, según confirmó el juez federal de Brasil, Odilón de Oliveira. Pese a las numerosas pruebas, la semana pasada, ambos legisladores de la ANR defendieron a “Chicharõ”. Lezcano consideró “mentiras” las evidencias sobre nexos de su amigo con el narcotráfico, mientras que D’Ecclesiis aseguró que “pondría las manos en el fuego por él”.