Fue a buscar solo a su hijo que estaba secuestrado

Juan Saucedo, padre de Fabián Saucedo Espinoza (21), peón secuestrado este sábado en Nueva Germania (San Pedro), dijo que ingresó al bosque y buscó solo a su hijo porque es pobre y “no tengo plata para darle a la policía para que me acompañe”.

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Fabián Saucedo Espinoza, peón secuestrado junto con el estanciero Fermus Flaskamp, este sábado en la localidad de Tacuruty, de Nueva Germania, departamento de San Pedro, regresó a su casa en horas de la mañana, en tanto que Fermus llegó a su propiedad en la madrugada del domingo.

Juan Saucedo, padre del peón dijo en comunicación con ABC Cardinal que su hijo llegó aproximadamente a las 7:30 de hoy. Sobre las condiciones en las que arribó manifestó que presentaba marcas “en su brazo donde se le esposó” además de que sentía mucho frío porque “llovió sobre él”. A Fabián “no se le pegó, pero a su patrón sí”, agregó.

Comentó que é no estaba en la casa cuando llegó su Fabián, el segundo de los cuatro hijos que tiene, entre ellos dos mujeres y dos hombres, porque salió temprano “a eso de las 4:00” hacia el monte para buscar al joven peón”. En otro momento señaló que luego de que el estanciero haya sido liberado “quedó mi hijo en el monte y hoy le busqué con linterna”.

Al ser consultado de si fue solo respondió “¿para qué le voy a esperar a alguien? Yo no tengo plata para darle a la Policía para que me acompañe”. Expresó que durante su incursión encontró un machete tirado en el suelo, además de rastros de que habrían sido atados los secuestrados y “me asustó eso”.

Posteriormente detalló que su hijo, tras salir de la zona boscosa atravesó un terreno ajeno para llegar a su vivienda. Ahí solo manifestó que pasó mucho frío porque llovió sobre ellos y que le tuvieron atado, además de que le vendaron los ojos para que no pudieran ver a sus captores.

Sobre la investigación de este hecho deseó que se investigue el secuestro de su hijo y se aclare todo esto. Agregó “esperemos que lo que pasó en Arroyito no se traslade hasta aquí” porque los que realizaron este intento de robo “son delincuentes comunes”.

Por último indicó que “no queremos que le maten por una plata miserable” pues por semana solo percibe la suma de entre 200.000 a 300.000 por los trabajos que realiza, entre limpiar terrenos y alimentar animales.

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