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Luego de un desayuno con autoridades del Ministerio de Justicia y Trabajo, en el Hotel Guaraní, José Félix Fernández fue abordado por la prensa sobre el retorno del embajador colombiano a Asunción.
Aunque destacó la actitud del gobierno extranjero, aclaró que se trató de una decisión unilateral y no de una postura en conjunto de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), integrada además por Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Ecuador, Surinam, Uruguay, Venezuela y Perú.
De esta manera, aclaró que el retorno del embajador Jorge Barrantes no constituye el gesto que Paraguay aguarda del bloque para invitarlo a integrar el grupo de observadores internacionales que seguirán las elecciones del 21 de abril del 2013.
Explicó que el regreso del diplomático obedece a que Colombia culminó las consultas realizadas luego del juicio político del 22 de junio, cuando Fernando Lugo fue destituido por el Congreso por mal desempeño en sus funciones.
Luego del cambio de gobierno, Paraguay fue suspendido del Mercosur y Unasur de manera irregular.
El país recientemente inició conversaciones con países latinoamericanos en busca de restaurar en parte de las relaciones diplomáticas.
La semana pasada, el presidente de la República, Federico Franco, aclaró que los observadores de la Unasur tienen libertad para observar las elecciones paraguayas, pero no tendrán carácter oficial, ya que no poseen una invitación del Gobierno.