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Según refirieron los alumnos, los atropellos están siendo presumiblemente ejecutados por operadores políticos del jefe comunal y del diputado Tadeo Rojas (ANR). Los alumnos también exigieron la presencia del ministro de Educación, Enrique Riera, para destrabar la medida adoptada.
Los jóvenes dijeron estar cansados por la actitud cómplice del intendente, quien estaría protegiendo a los vecinos que se oponen a la construcción de un vallado perimetral para la escuela. El motivo de la oposición es que los vecinos desean seguir utilizando el predio de la institución como calle improvisada.
Según la directora, Élida Denise González, desconocidos destrozaron en la madrugada del domingo unos 300 metros del vallado perimetral de la institución que fuera construida recientemente con G. 150 millones del Fondo Nacional de Inversión Pública (Fonacide), de la Gobernación de Central.
La docente dijo que tras el último suceso, en la mañana de ayer viernes se llevó a cabo una audiencia con el intendente y representantes del la institución. También estuvieron presentes los vecinos que están en contra de la construcción.
Élida Denise González sostuvo que salió indignada de la reunión, pues, según dijo, el intendente apoyó el hecho vandálico y no permitió a hablar ni a los representantes de la institución ni de la Gobernación. La directora acusó a Denis Torres de instigador.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Padres, Édgar Benítez, denunció que los vecinos de los asentamientos colindantes no solo cuentan con la supuesta complicidad del intendente Denis Torres, sino que también del jefe de la Comisaría 37º de Valle Pucú, el Comisario Principal Alberto Luis Bataglia, quien hasta el momento no se ha acercado a interiorizarse del conflicto, alegando que es competencia de la Fiscalía.
La medida de presión tomada por los alumnos pone en riesgo el desarrollo de clases para semana siguiente, dijo la directora.
Entretanto, los alumnos reciben el apoyo de sus padres para llevar adelante la protesta en la institución. Dijeron que no descartan una manifestación frente a la Municipalidad de Areguá para el próximo lunes.
A su turno, el intendente aregüeño Denis Torres, negó que esté apoyando a los vecinos.
Declaró que junto al diputado Tadeo Rojas están conversando con el gobernador Blas Lanzoni (PLRA), para buscar una solución al conflicto entre estudiantes y vecinos.
Al ser consultado sí los responsables del hecho vandálico son sus operadores políticos, refirió: “Ellos no son caudillos. Son votantes”, indicó.
Agregó que el conflicto es de larga data y que llamó al jefe de la comisaría jurisdiccional para brindar seguridad a los estudiantes y vecinos.
Por su parte, los pobladores quieren que lo que ellos consideran una “calle” se abra nuevamente, y aseguran que “es lo único que piden”.
Mientras, los pobladores utilizan el predio como un vertedero clandestino, arrojando su basura y talando árboles del predio de 2 hectáreas.
Precisamente, la negativa de los vecinos fue la que desencadenó en la protesta de los estudiantes y docentes de la institución. Luego prosiguió la obra, pero el domingo el vallado fue destrozado nuevamente.
La Policía, a cargo del comisario Bataglia no investigó a los presuntos responsables del hecho vandálico y perjuicio a la institución.