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Poco antes de las 7:00 se inició el violento desalojo del predio, con una fuerte presencia policial y diversas agresiones por parte de los ocupantes. A raíz de la reacción de los invasores, quienes atacaron con honditazos e incluso armas de fuego, los uniformados también tuvieron que utilizar gases lacrimógenos y balines de goma.
Además, también entraron al predio agentes de la montada y de los cascos azules para tratar de repeler los ataques. Incluso, se solicitó el ingreso de la ambulancia, ya que se estarían registrando los primeros heridos, reportan desde el lugar de los hechos.
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Armas de fuego, improvisadas bombas molotov y las clásicas honditas cargadas con piedras y balitas formaron parte del “arsenal” que utilizaron los ocupantes para “defenderse” de los uniformados. Un oficial de la montada habría resultado herido en un ojo, por lo cual fue rápidamente retirado a bordo de la ambulancia.
Tras 15 minutos de desmedida violencia, empezaron a calmarse los ánimos y a producirse las primeras detenciones. Además, las primeras gotas de lluvia aportaron un poco de calma en el lugar.
“Vimos que hay personas heridas, que están siendo asistidas, socorridas por las diversas ambulancias que están en las inmediaciones del lugar”, señaló la fiscala Fátima Villasboa. Aseguró además que hasta el momento es imposible determinar la cantidad de heridos.
La fiscala señaló que simplemente dieron cumplimiento a la orden judicial y que los ocupantes ya fueron advertidos previamente para que abandonen el predio. Agregó que la causa data del año pasado y desde diciembre hay intenciones de realizar el desalojo.
Ya durante el rastrillaje, los agentes policiales encontraron cajas repletas de bombas molotov esparcidas cada 20 metros. Detallaron que las improvisadas botellas de vidrio están llenas de aceite, alcohol y nafta.
Muchas precarias viviendas ardieron en llamas, mientras lentamente las familias seguían abandonándolas y sacando lo que podían rescatar. En varias se hallaron objetos contundentes y bombas molotov.
Cabe mencionar además que durante la madrugada los supuestos "sintierras" cercaron el asentamiento con alambre de púas, para evitar el desalojo. Muchas familias quisieron salir de manera voluntaria, pero un grupo violento de ocupantes se lo impidió, reportó la periodista de ABC Color Gladys Villalba.
Unos 2.000 efectivos policiales fueron convocados para este operativo que se registra en un predio de Copaco. Unas 700 familias ingresaron a las 68 hectáreas a mediados de 2018.
La propiedad se extiende desde la tercera compañía Isla Bogado hasta la cuarta compañía Cañada San Rafael y el asentamiento se denomina “12 de Junio Héroes del Chaco”.