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Un caso concreto denunciado corresponde a una alumna suya en la filial de Quiindy de la Facultad de Derecho.
Representantes universitarios solicitaron al Consejo Directivo la suspensión del mismo, por lo que la Fiscalía General se limitó a abrir un sumario.
Además fue suspendido como docente y miembro del Consejo Directivo de la UNA, mientras dure el sumario que también ordenó el decano y ministro de la Corte Suprema de Justicia, Raúl Torres Kirmser.
Lo llamativo, según el documento que presentó el exfiscal Roberto Velázquez Vezzetti, el jueves 8 a la oficina de denuncias penales de la Sede I, es que de oficio ningún fiscal abrió una investigación para dilucidar si es verdad o mentira que acosaba sexualmente a una alumna para no recursar un año.
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En ese sentido, refiere que la norma procesal señala claramente que el agente fiscal tiene la obligación de investigar de oficio.
“Llama la atención la falta de acción, indiferencia, complacencia, pereza o como se quiera calificar la actitud del Ministerio Público ante las publicaciones periodísticas en medios escritos y que circulan en redes sociales, sobre la supuesta conducta criminal reiterada del fiscal adjunto Patricio Gaona, un oscuro personaje con abultado antecedentes sobre acoso sexual y, peor aún ejerciéndolo en el departamento más grande del país", indicó.
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El escrito presentado por Velázquez Vezzetti argumenta que realiza la denuncia como ciudadano, padre de familia y ex fiscal, preocupado por la gravedad de los hechos denunciados. Así mismo, “por la impresionante reiteración de los mismos y para proteger a una enorme cantidad mujeres y hombres que se encuentran desprotegidos del poder y la criminal conducta de este funcionario”, acota la nota.