Un portavoz del centro médico precisó posteriormente que la fallecida es la enfermera que respondió a la llamada de la locutora de la emisora de radio de Sídney 2Day FM que se hizo pasar por la reina Isabel II de Inglaterra, abuela de Guillermo, y se la transfirió a la compañera que atendía a Catalina.
Guillermo y Catalina se declararon “profundamente entristecidos” por esta muerte, según un comunicado difundido por el Palacio de Saint James.
La policía británica señaló a la AFP que estaba investigando la “muerte inexplicada” pero “no sospechosa” de la enfermera, cuyo cuerpo fue hallado el viernes por la mañana en una vivienda cercana al céntrico hospital, y que esperaban los resultados de los análisis post mortem este fin de semana.
Varios medios de comunicación británicos especularon sobre un posible suicidio que, por el momento, no ha sido confirmado.
La locutora australiana Mel Greig llamó la madrugada del martes al hospital donde Catalina había sido ingresada en la tarde del lunes con fuertes náuseas y vómitos, y forzando la voz para parecer británica y de más edad más edad pidió que la comunicaran con “Kate, (su) nieta” .
“Por supuesto, no cuelgue, ma’am” , la contracción de madam (señora) con la que los británicos se dirigen a la reina, le respondió la operadora, según la grabación del programa colgada por la emisora en internet.
Mientras tanto, en el estudio de la radio australiana, el otro locutor del programa, Michael Christian, que hacía de príncipe Carlos, le decía con una carcajada a la falsa “reina": “Si esto a funcionado, es la broma telefónica más fácil que hemos hecho jamás” .
Poco después, otra enfermera descuelga, y le responde que Catalina “duerme y ha pasado una noche tranquila” , y que no ha tenido “ninguna arcada” desde que comenzó su turno, entre otras informaciones supuestamente confidenciales sobre la paciente.
El hospital, por el que en los últimos años han pasado también la reina, su esposo el duque de Edimburgo o la esposa del príncipe Carlos, Camila, admitió su error el miércoles por la mañana, antes de calificar horas después el incidente de “lamentable” .
“Nuestros enfermeros son personas generosas y profesionales entrenados para ocuparse de los pacientes, no para lidiar con artimañas periodísticas de este tipo” , dijo entonces el director del hospital, John Lofthouse, sin descartar una acción judicial contra la radio australiana.
La radio, que todavía no ha reaccionado a la muerte de la enfermera, pidió disculpas, al igual que los dos locutores.
Un portavoz de la secretaría de los duques de Cambridge, como se conoce oficialmente a Guillermo y Catalina, señaló el viernes que “en ningún momento el palacio se quejó del incidente” .
"Al contrario, ofrecimos nuestro pleno y sincero apoyo a las enfermeras afectadas y al personal del hospital en todo momento.
La duquesa de Cambridge, embarazada de menos de 12 semanas de su primer hijo, abandonó el jueves el hospital donde fue tratada por una hiperméresis gravídica, una forma severa de náuseas y vómitos que puede conducir a una deshidratación, agradeciendo al personal del hospital por la atención y el tratamiento.