Un portavoz comunitario dijo a EFE que el Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), que dirige la alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini, “sigue de cerca la evolución de lo que ocurre en Paraguay a ese respecto”.
Igualmente se refirió a que la posición es la misma que a finales de abril han expresado en referencia a otros casos similares ocurridos en Paraguay, organismos del sistema de Naciones Unidas como ONU Mujeres y los Fondos de Población de la ONU (UNFPA) y de la Infancia (Unicef).
Esos organismos exhortaron a Paraguay, a su ciudadanía y a las familias a redoblar esfuerzos en la protección de niñas y adolescentes ante toda forma de violencia, incluyendo la sexual, dentro y fuera de sus hogares. También pidieron al país que implemente políticas públicas integrales de prevención que garanticen que la población sabe dónde y cómo realizar las denuncias ante casos de abuso, además de proporcionar información adecuada basada en derechos humanos.
En ese sentido, el mismo portavoz comunitario subrayó “el pleno compromiso de la UE en la protección y promoción global de los derechos de los niños y de sus necesidades, incluyendo la eliminación de todas las formas de violencia”.
La UE, agregó la fuente, está trabajando en la elaboración de un nuevo plan de acción sobre los derechos humanos y la democracia (2015-2019) y en otro sobre género y desarrollo (2016-2020), además de que sitúa la lucha contra la violencia de género entre las prioridades de su agenda política.
Los eurodiputados del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) Iratxe García, Elena Valenciano y Ramón Jáuregui enviaron el miércoles una carta al embajador de Paraguay en Bruselas en la que expresaron su preocupación por el caso de esta niña, al tiempo que reclamaron información a las autoridades de ese país sobre este caso.
También indicaron que el Parlamento Europeo (PE) presta una atención constante a los derechos humanos de todo el mundo, y a los de las mujeres en particular.
El caso de la niña de 10 años embarazada, tras ser presuntamente violada por su padrastro, ha destapado una cruda realidad en Paraguay, donde más de 600 menores entre los 10 y 14 años de edad dieron a luz en 2014, según cifras del Ministerio de Salud.