Según informó hoy el responsable de interior del Gobierno catalán, Ramón Espadaler, los arrestados, de entre 17 y 45 años, tenían “la voluntad explícita” de cometer un atentado en esta región. Junto al ciudadano paraguayo, la Policía detuvo a cinco españoles -cuatro de ellos convertidos al Islam- y cinco marroquíes. A los arrestados se les acusa, entre otros delitos, de pertenencia a una organización terrorista.
La célula, según Espadaler, se dedicaba también a captar a jóvenes islamistas para radicalizarlos en el yihadismo, así como a enviarlos a combatir con el Estado Islámico en Siria e Irak. Fuentes próximas al caso informaron a EFE que esta operación está relacionada con otra llevada a cabo a mediados de diciembre de 2014, cuando tres jóvenes residentes en Cataluña, dos de origen marroquí y un brasileño convertido al Islam, fueron detenidos en Bulgaria cuando iban a entrar en Turquía para incorporarse al ejército del EI en Siria.