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Estados Unidos y Francia están considerando una acción militar contra Damasco en respuesta a un ataque químico del 21 de agosto que provocó la muerte de cientos de personas.
El Vaticano divulgó la carta cuando la Santa Sede informaba a embajadores sobre iniciativas del Papa, incluido un día internacional sin precedentes de ayuno por la paz en Siria, que el Sumo Pontífice convocó para este sábado.
Los enviados de Estados Unidos y Francia se encontraban entre unos 70 embajadores en la reunión del jueves con el arzobispo Dominique Mamberti, el canciller del Vaticano. "Es lamentable que, desde el comienzo del conflicto en Siria, han predominado los intereses unilaterales y de hecho dificultado la búsqueda de una solución que hubiera evitado la masacre sin sentido que ahora se desarrolla", dijo el Papa.
"A los líderes presentes, a cada uno, les hago una apelación sincera para que ayuden a encontrar formas de superar las posiciones en conflicto y dejar de lado la fútil búsqueda de una solución militar", dijo Francisco en su carta.
El Papa agregó que la comunidad internacional, en cambio, debería presionar por "una solución pacífica a través del diálogo y la negociación".
Putin está tratando de disuadir al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, de los ataques aéreos para castigar al mandatario sirio, Bashar al-Assad, por el ataque con armas químicas, que Occidente atribuye al Gobierno de Siria.
El Gobierno sirio niega que haya sido responsable. En la carta, Francisco, el excardenal argentino Jorge Bergoglio, le pidió al presidente ruso que rezara por él. Putin siempre asiste a importantes actos religiosos de la Iglesia Ortodoxa Rusa y ha fortalecido sus lazos con la Iglesia en los últimos años como parte de un enfoque conservador que ha tomado como presidente para llegar a más votantes tras protestas callejeras de la oposición.
El Vaticano ha reiterado su posición sobre Siria toda la semana desde que el Papa anunció su iniciativa para la paz el domingo. El viceministro de Justicia del Vaticano dijo que la guerra civil en Siria tenía "todos los ingredientes" para causar un conflicto global y el líder de la orden jesuita mundial afirmó que una intervención militar de Estados Unidos o Francia sería "un abuso de poder".
El Papa convocó a los 1.200 millones de católicos romanos del mundo a sumarse el sábado en un día de rezo y ayuno para poner fin al conflicto sirio. Invitó a miembros de todos los credos a unírsele en todo el mundo de la manera que consideren adecuada.
Francisco dará una misa en la Plaza San Pedro, que se espera atraiga a cientos de miles de personas. Con una duración de unas cinco horas, será uno de los eventos más largos realizados en el Vaticano.