La Abogacía General de la Unión (AGU, que representa los intereses del Ejecutivo brasileño), presentó el martes esa demanda contra British American Tobacco (BAT), Philip Morris International y sus subsidiarias ante una corte federal.
La AGU pretende recuperar al menos parte de los miles de millones de dólares destinados en los últimos cinco años a tratar pacientes que sufren de alguna de las 26 enfermedades relacionadas con el consumo de productos con tabaco o con la exposición al humo del cigarro. Debido a que las compañías repatrian sus ganancias, “es justo que paguen por el daño que causan a la sociedad brasileña”, dijo el fiscal Davi Bressler en un comunicado.
El valor de la compensación solicitada se calculará si la demanda es exitosa, dijo la AGU. La OMS se congratuló el jueves por la “acción del gobierno brasileño”.
BAT, Philip Morris y sus subsidiarias suman 90% de la producción y venta de cigarros en Brasil, según la AGU. Las dos firmas indicaron que hasta este viernes no habían recibido las notificaciones de las demandas. El portavoz de Philip Morris, Ryan Sparrow, puso en duda las posibilidades de éxito de la AGU.
“Vale la pena señalar que en los últimos 20 años o más, las cortes en Brasil han constatado que los fabricantes de tabaco no son responsables de los daños causados por fumar, debido a que la venta de cigarros es una actividad legal y estrictamente regulada y a que los riesgos a la salud por fumar son conocidos desde hace décadas”, dijo Sparrow a la AFP.
Souza Cruz, una subsidiaria de BAT, señaló que aguardará a conocer el contenido de la demanda antes de pronunciarse. Pero cuestiona el porcentaje mencionado, aduciendo que más de la mitad de los cigarros del mercado brasileño son contrabandeados desde Paraguay.
Compañías tabacaleras han sido forzadas a pagar miles de millones de dólares en compensación por demandas presentadas por gobiernos y fumadores en todo el mundo, debido a los efectos en la salud causados por el consumo de cigarros.