"Es importante dejar claro que no es lo mismo despenalizar que legalizar: despenalizar implica un beneficio para quien consume, para el adicto, no para quien ofrece, para el que trafica", dijo Campa en conferencia de prensa.
En cambio, añadió, "legalizar implica una decisión que resuelve de manera completa este problema para toda la cadena".
El subsecretario para Prevención y Participación Ciudadana opinó que de darse un debate sobre la legalización de la marihuana en México deben tomarse en cuenta los niveles de consumo porque "ello puede afectar a muchas personas".
"En México los niveles de consumo siguen siendo relativamente bajos. El peligro de un esquema de legalización en sociedades con niveles de consumo bajos es que incremente el consumo; se trata de un tema muy serio que tiene que analizarse de manera muy profunda", abundó.
Al término de su comparecencia ante la Comisión Bicameral de Seguridad Nacional del Congreso, el subsecretario enfatizó que el Gobierno federal ha expresado la necesidad de que el tema sea abordado en el ámbito internacional.
En medio de un creciente debate en México sobre la legalización del consumo y venta de la marihuana, recordó que en este país se optó por un modelo de la despenalización pues "está demostrado que la legalización de la marihuana no garantiza disminuir la violencia".
Aclaró que el Gobierno mexicano se seguirá enfrentando el problema de las adicciones desde la perspectiva de la salud pública.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Diputados, Francisco Arroyo Vieyra, opinó "como legislador y como abogado" que si en Estados Unidos están legalizando la marihuana en varios estados " sería una torpeza que nosotros como país no abordáramos el tema, lo criminalizáramos, llenáramos las cárceles de comerciantes de cannabis que tienen por objeto llevarla a donde ya está legal".
"Es un asunto que tenemos que abordar y creo que es un asunto que, con las previsiones necesarias de salud, prevención, información, el país y sus legisladores lo tienen que abordar con toda seriedad", declaró al ser interrogado al respecto en una conferencia de prensa.
Argumentó que "las partes oscuras de la sociedad también se norman, porque de otra forma se salen de cauce y generan mucho más agravios para la sociedad que lo que eventualmente el bien jurídico mayor pudiese tutelar".
"Las prohibiciones al extremo lo único que producen es una violencia que, en este caso, ha costado ya decenas de miles de muertos", puntualizó el legislador del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Un sondeo divulgado ayer por la encuestadora Gabinete de Comunicación Estratégica indicó que 49,6 % los mexicanos están en contra de la legalización de la marihuana en el país, mientras sólo 13,4 % respaldan esa medida.
En el caso de que México despenalizara la venta de marihuana, el 59 % opinó que una decisión así perjudicaría al país, mientras que 29,9 % estimó que lo beneficiaría.
Varias figuras públicas, entre ellos el expresidente Vicente Fox y ministros de Gobiernos anteriores, promueven un debate serio sobre la despenalización de la marihuana, convencidos de que esa medida contribuirá a reducir la violencia en el país pues mermaría las ganancias de las organizaciones criminales.
En este país ya es legal poseer hasta cinco gramos de marihuana para consumo personal.
ALERTA SOBRE EFECTOS NOCIVOS
De acuerdo con la Secretaría de Salud del Gobierno de México, existe evidencia que cuando la adicción a la cannabis se inicia en edades tempranas, "ocurre una disminución de las capacidades intelectuales y cognoscitivas, y es causa de problemas escolares y deserción".
Asimismo, añadió, "al afectar los reflejos y propiciar una pérdida de la noción de las distancias y el tiempo, es causa de graves accidentes y pérdida de motivación".
"La discusión no es la legalización. El tema es la violación al derecho humano de la protección de la salud de los mexicanos, como garantía social establecida en el Artículo 4 de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos", puntualizó.