Cargando...
“Hay que acatarlo (el juicio político), es un mecanismo constitucional pero desde otras instancias organizativas seguramente decidiremos hacer una resistencia para que el ámbito democrático y participativo del Paraguay se vaya consolidando”, dijo Lugo.
El juicio político se desarrollaba este viernes sin la presencia del mandatario paraguayo, quien permanecía en sus oficinas del Palacio de Gobierno, a unos 200 metros de la sede del Congreso.
“Nosotros instamos siempre que todas las manifestaciones sean pacíficas. Instamos por la no violencia, pero sí con la madurez necesaria de sus líderes. Pero también con la firmeza iremos ejerciendo nuestros derechos”, señaló el mandatario antes del inicio del juicio político para su destitución.
“Es más que un golpe de Estado al presidente, un golpe parlamentario con un ropaje jurídico, con una herramienta como es el juicio político pero con motivos que no se ajustan a la verdad”, señaló Lugo.
Lugo fue acusado de “mal desempeño de sus funciones” por la Cámara de Diputados el jueves, seis días después de un enfrentamiento armado que costó la vida a 11 campesinos y 6 policías, que realizaban un operativo para desalojar un predio ocupado por los sin tierra.
En caso de ser destituido “asumiría el vicepresidente Federico Franco, que es del Partido Liberal, que son los que han impulsado este juicio político”, aseveró el mandatario paraguayo.
“Desde el primer día que hemos asumido nunca hubo una comunión en las decisiones” con Franco, admitió el jefe de Estado.
Lugo señaló que recibió los llamados de sus homólogos de Venezuela (Hugo Chávez), Ecuador (Rafael Correa) y Bolivia (Evo Morales) , así como el apoyo por escrito de las presidentas de Argentina, Cristina Kirchner, y de Brasil, Dilma Rousseff.
“Aquí saben que mi destitución tendrá consecuencias”, dijo Lugo, y advirtió que “Paraguay debe entender que ya no es una isla y los procesos de integración exigen compromisos mutuos”.
Paraguay integra los espacios regionales de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y el Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, como socios plenos), cuyos presidentes tienen previsto celebrar una cumbre dentro de una semana en la ciudad argentina de Mendoza (oeste).