“El arresto de Leopoldo López es una violación atroz de uno de los más básicos principios del debido proceso: no se puede encarcelar a alguien sin tener pruebas que lo vinculen con un delito”, dijo este martes en un comunicado José Miguel Vivanco, director de HRW para las Américas.
El líder opositor López se entregó este martes a la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada) en Caracas después de que Maduro emitiera una orden de búsqueda y captura contra él, al responsabilizarle del clima de violencia que vive Venezuela desde el miércoles pasado, cuando las marchas de protesta contra el Gobierno se saldaron con tres muertos y decenas de heridos y detenidos.
“Las autoridades de Venezuela no han aportado hasta ahora ninguna prueba seria -para acusar a López-, sólo insultos y teorías de conspiración. La única causa probable aquí parece ser el hecho de que López es un oponente político del presidente, pero desafortunadamente, en un país sin una Justicia independiente, esto puede ser suficiente”, consideró Vivanco.
Y añadió: “La comunidad internacional debe pedir la inmediata e incondicional liberación de López”.
Las protestas contra el Gobierno de Maduro en varias ciudades de Venezuela, que tuvieron su momento más agrio el pasado miércoles, se han saldado hasta el momento con tres muertos y decenas de heridos y detenidos.