Eric Garner, de 43 años, que vendía ilegalmente cigarrillos en una calle del barrio de Staten Island, murió el 17 de julio cuando un policía, Daniel Pantaleo, lo sometió con una llave de estrangulamiento que al final terminó con su vida.
El gran jurado había sido convocado especialmente para analizar si había motivos suficientes para llevar a los tribunales al policía, pero decidió no presentar cargos, después de varias semanas de consultas, aunque se desconocen las razones de la decisión.
La acción policial fue grabada en vídeo por un transeúnte. En la imagen se ve a Garner, de gran complexión física y enfermo de asma, diciendo repetidas veces: “¡No puedo respirar!” Tenía seis hijos y la policía quería detenerlo por vender tabaco ilegalmente.
El caso de Garner se recibió con gran preocupación en Nueva York porque se suma a otros de brutalidad policial y, además, se produjo poco antes de que el joven negro Michael Brown muriera por disparos de la policía en Ferguson (Misuri) .
Tampoco en el caso de Ferguson el gran jurado convocado decidió imputar al policía que hizo los disparos, lo que generó fuertes protestas el mes pasado tanto en esa localidad como en otros lugares de Estados Unidos, incluido Nueva York.
Hoy se repitieron estas protestas en Nueva York tras conocerse la decisión del caso de Garner. Participaron centenares de personas que se concentraron en Times Square, la plaza más emblemática de la ciudad.
Llevaron pancartas que decían, entre otras cosas, “El racismo mata” o “Las vidas de los negros cuentan” . Coreaban himnos en los que recordaban las palabras de Garner ("No puedo respirar") y exigían justicia.
Todo ello ante una fuerte presencia policial, aunque no se registraron incidentes.
Entre los manifestantes se encontraba Israel Galindo, de origen mexicano, que vinculó el caso de Nueva York al de Ferguson y, también, al de los 43 estudiantes desaparecidos en México.
“El Gobierno está detrás de todo, y todo esto es un crimen de estado”, dijo a Efe el manifestante.
Agregó que “algunos tenían la esperanza de que con (el presidente Barack) Obama ya no habría racismo, pero está dominado por los republicanos y el 'Tea Party'”.
Después de concentrarse en Times Square, los manifestantes se dirigieron hacia el Rockefeller Center, donde estaba prevista esta noche el encendido del icónico árbol de Navidad, uno de los actos que meten de lleno a esta ciudad en el ambiente navideño.
Con el fin de intentar cortar el paso de los manifestantes, la policía cortó las calles de acceso, generando un gran caos de tráfico.
Mientras tanto, desde Washington, el fiscal general de Estados Unidos, Erick Holder, anunció que las autoridades federales procederán en este caso con una investigación “independiente, exhaustiva, imparcial y expedita”.
También dijo que el Departamento de Justicia hará una revisión a fondo de todos los materiales, incluido el vídeo de su detención.
La decisión del gran jurado recibió muchas reacciones negativas, tanto a nivel federal como de Nueva York.
En un acto oficial, el presidente estadounidense, Barack Obama, al referirse al caso lamentó que haya “demasiados incidentes” en las que los ciudadanos, especialmente de las minorías, hayan perdido su confianza en el sistema.
“Hay una preocupación en demasiados miembros de la comunidades minoritarias en que los agentes de la ley no están trabajando con ellos de una forma justa”, afirmó Obama.
El gobernante dijo que las autoridades seguirán implementando medidas para que haya un “fortalecimiento de la ley y de la responsabilidad” de los funcionarios, con el fin de reforzar los lazos con las distintas comunidades.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, calificó este miércoles como un “día de dolor” y “de luto”, según dijo en una declaración ante los periodistas en una iglesia próxima al lugar del barrio de Staten Island donde murió Eric Garner.
De Blasio recordó que Garner era “un buen esposo, un buen padre, un buen hombre”. “Debería estar con nosotros”, insistió.
El alcalde insistió en que en la Policía de Nueva York no hay espacio para agentes “corruptos, brutales o racistas” y pidió además a que quien quiera protestar por la decisión de hoy del gran jurado que lo haga de forma pacífica.
“Eric no quería violencia. La violencia no lleva a ningún lado”, insistió el alcalde.