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“Venir a Paraguay siempre es interesante y emotivo, no es la primera vez que vengo y siempre encuentro algo distinto, nuevo y mejor”, escribió el músico y compositor argentino Andrés Calamaro en el texto de su blog oficial.
Es que el concierto que dio la noche del sábado en el Yacht y Golf Club Paraguayo encendió a unas 6.000 personas en el Court Central. Entre hits de tiempos de Los Rodríguez, repasando toda su segunda etapa solista (desde “Alta Suciedad” hasta seis estrenos de su más reciente álbum, “Bohemio”), el público disfrutó con intensidad las dos horas del concierto.
“La apertura con repertorio de Los Rodríguez fue recibida con estruendo, con generosos aplausos de dinamita. Después presentamos canciones del "Bohemio", escuchadas con respeto y entusiasmo por un público masivo, que cubre todo el arco posible de públicos posibles. Muchos vienen a reconocerse en los éxitos (que por suerte existen, resisten y se multiplican); y adivinamos que esto tenía que estallar con la secuencia de greatest hits. Mea culpa”, relató El Salmón.
Entre los momentos de emoción, rescató la versión que hizo de “Walk on the Wild Side”, del recordado Lou Reed, “Creí oportuno contarle a los mas jóvenes o inexpertos quién fue Lou Reed, su impronta poética de Rey de NYC. Fue saludado con aplausos por todo lo alto”, expresó.
Otro momento cumbre fue cuando el autor de “Crímenes perfectos” saludó y pidió la recuperación de Charly García, casi a modo de mantra. “Todos elevamos una plegaria de redención y salud para Charly García, informados de su episodio en Bogotá, gritándole ‘Cuí-de-se, Charly, cuídese’”.
El prolífico compositor también se acordó de la protesta del pueblo paraguayo con los senadores que salvaron al senador colorado Víctor Bogado del desafuero. “Saludamos la lucha del pueblo paraguayo, quizás ajenos -pero nunca ingenuos- frente a la palabra del pueblo que reclama por sus necesidades de justicia”.
Un instante musical celebrado por el público fue, sin dudas, “Paloma”. “Una canción que nadie pensó como radiofórmula y terminó convertida en obligado rito ceremonial de gratitud, en un símbolo mismo de la identidad que tantos compartimos durante dos horas o cinco minutos”, comentó el autor.
“Fue muy emocionante enfrentarse al afecto del público joven del Paraguay, y de aquellos menos jóvenes que también estamos…”, relató, antes de rescatar los momentos de euforia de “Alta Suciedad” y “Los Chicos”.
El cantante reconoció la emoción que le desbordó, incluso al borde de las lágrimas. “Todo era emoción cuando apreté los puños para no derramar lágrimas en público porque me da vergüenza y nunca me pasa. Escondí mi rostro entre las manos como un musulmán, después de sostener la bandera paraguaya (con Mariano) y besar este suelo”.
“Esos largos segundos aguantando con pudor masculino las lagrimas de un varón que se siente muy agradecido. Con todos mis compañeros, que son muchos y viven los recitales con idéntica responsabilidad, participando todos. Con el público americano que, de nuevo, se mostró generoso frente a nuestro deseo de brindar siempre el mejor recital de nuestra vida”, reflexionó.
Andrés Calamaro seguirá su gira "Bohemio Tour el miércoles 20 próximo en la provincia argentina de Salta y proseguirá el sábado 23 en su primer recital en Bolivia. Finalmente, cerrará el año el sábado 7 de diciembre en el Hipódromo Argentino de Palermo, en Buenos Aires.