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Pese a contar con una de las hidroeléctricas más grandes del mundo, hasta hace poco Paraguay nunca fue visto como un potencial en la industria automotriz, y menos en el campo de la electricidad.
El sueño del primer vehículo fabricado totalmente en Paraguay se gesta poco a poco y se concretará en junio próximo, según garantiza Carlos Melgarejo, superintendente de Movilidad Eléctrica Sustentable de la Binacional Itaipú.
La binacional lleva adelante el proyecto, junto al Parque Tecnológico Itaipú, desde diciembre del 2011.
La idea era lanzar un prototipo, totalmente diferente a los anteriormente presentados, durante la Expo 2012, en Mariano Roque Alonso.
A estas alturas, se trabaja por la fabricación del chasis y la carrocería, que brindarán al rodado proyectado un modelo similar a una camioneta Jeep, para cuatro personas.
Al ser abordado sobre el condimento innovador del proyecto, Melgarejo señala que los automóviles y buses inaugurados anteriormente por la Itaipú en realidad eran fabricados casi en un 100% en el lado brasileño.
“Años atrás, el Paraguay estuvo un poco relegado en lo que es la fabricación de carrocerías”, explica el responsable de la iniciativa, al aclarar que la tecnología del motor eléctrico ya data de hace varios años.
La Itaipú trabaja en ensamblaje de vehículos eléctricos desde el 2006, recuerda Melgarejo.
200 KM. POR G. 20.000
El vehículo -además de los beneficios para el medio ambiente- tendrá una autonomía de 200 kilómetros aproximadamente.
Constará de un motor de 40 KV, cuya potencia es igual a alrededor de 50 caballos de fuerza, mayor que los automóviles presentados con anterioridad.
Igualmente, estará provisto de dos baterías Cebra Z 36, que podrán ser recargadas durante ocho horas, preferiblemente durante la noche, para ser utilizadas nuevamente en las jornadas laborales, explica Melgarejo.
Respecto al costo que supondrá la movilidad de este tipo de vehículos, aclaró que por cada 100 km se gastará aproximadamente G. 10.000 en consumo eléctrico.
Otro detalle técnico es la suspensión independiente en las cuatro ruedas y una computadora con pantalla táctil, con la cual el conductor podrá acceder a informaciones básicas sobre el estado de la camioneta.
El vehículo, que tendrá un peso total de 1.600 kilos, será lanzado con la marca Aguara (en español, zorro), cuyo logo fue diseñado por el artista Juan Pistilli, refiere Melgarejo.
FABRICACIÓN A GRAN ESCALA
Al ser abordado sobre las utilidades que tendrá el vehículo, Melgarejo señala que inicialmente será usado en tareas de la Itaipú y la ANDE.
Se fabricarán más modelos de este tipo, a fin de ser distribuidos entre ambas entidades e incluso otras instituciones estatales. “En poco tiempo van a ver vehículos eléctricos en tareas de mantenimiento de la ANDE”, adelanta al aclarar que se trata de rodados utilitarios.
El funcionario indica que el proyecto fue concebido como muestra de que en Paraguay es posible impulsar proyectos de industrialización automotriz.
“Lo que nosotros estamos demostrando es que se puede. Así como está Paraguay, se tiene la gente necesaria para llevar adelante cualquier tipo de emprendimiento de naturaleza automotriz”, refiere.
Respecto a la posibilidad de fabricar unidades de manera masiva, aclara que ya dependerá del sector privado.
La Itaipú adelanta, sin embargo, que iniciará conversaciones con empresas locales que ya proyectan lanzar camionetas a combustible fósil.
La binacional pondrá a disposición la tecnología para buscar alianzas estratégicas, explica Melgarejo.
“Los empresarios aún le están dando la vuelta a esto. Es porque aún no les cierra los números. Pero es cuestión de tiempo”, manifiesta.
Respecto al costo de la fabricación de esta primera unidad, menciona que la cifra ronda los US$ 60.000.
Aclara, sin embargo, que el precio al público aún debe determinarse luego de concretarse un proyecto de fabricación a gran escala.
Sobre el tiempo que aún debe aguardarse para adquirir vehículos eléctricos paraguayos de las playas locales, Melgarejo señaló que es una “realidad inminente”.
“Para nosotros, esto es inminente. No te puedo decir un tiempo, quizás en unos seis años. La iniciativa ya está caliente. Esto es una cosa sin retorno”, finaliza.