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Desde la década de 1950, la atmósfera y el océano se han calentado, los volúmenes de nieve y hielo han disminuido, el nivel del mar se ha elevado y las concentraciones de gases de efecto invernadero han aumentado, según el informe del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC). Todo esto ha ocurrido a causa del cambio climático
La definición concreta del cambio climático es "el cambio de clima, atribuido directa o indirectamente a la actividad humana, que altera la composición de la atmósfera global y se suma a la variabilidad natural del clima, observada durante periodos de tiempo comparables".
El cambio climático impacta a nivel nacional en el rendimiento de los cultivos, en la proliferación de enfermedades, en los bienes y servicios de los ecosistemas y en la disponibilidad de los recursos hídricos, entre otras cosas.
Los efectos del cambio climático se miden a largo plazo. “Por ello nunca podés asegurar que un evento en particular, como tormentas fuertes o variaciones bruscas y constantes de temperatura, se producen a causa del cambio climático. Los problemas con el tiempo 'podrían' ser acentuados por el cambio climático, pero nunca podemos asegurar en un corto periodo de tiempo”, aclaró Ethel Estigarribia, directora de la Oficina Nacional de Cambio Climático de la Secretaría Nacional del Ambiente.
El índice de vulnerabilidad al cambio climático en nuestro país es de solo el 1,58. Estigarribia destacó el hecho de que el problema del cambio climático trasciende fronteras, por lo cual, pese a las acciones que se puedan tomar a nivel local, nunca serán suficiente si las demás naciones no ponen de su parte. “Es una problemática que trasciende fronteras, por más que nosotros seamos los que menos gases invernaderos emitan, lo que hagan en el otro país nos afecta”, destacó.
El calentamiento global es el fenómeno ligado al cambio climático, y consiste en el acelerado aumento de la temperatura en la tierra. El mismo está causado por el aumento de la emisión de gases de efecto invernadero, que a su vez es ocasionado por actividades como la tala indiscriminada de bosques, quema de basuras y combustibles utilizados por los vehículos.
El secretario general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), Petteri Taalas, afirmó que en el 2016 se registraron numerosos valores máximos de cambios climáticos: una serie prolongada de temperaturas y fenómenos meteorológicos extremos sin precedentes en todo el mundo.
Cada una de las pasadas décadas ha sido considerablemente más cálida que la anterior. El período del 2011 al 2015, en especial este último, fueron los más cálidos de la historia.
En los primeros tres meses de 2016 también se registraron temperaturas sin precedentes, que se desviaron como nunca antes de los valores de referencia, según los datos de la Administración Nacional del Océano y de la Atmósfera (NOAA) de Estados Unidos, la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA) y el Servicio Meteorológico de Japón.
La OMM citó algunos de los acontecimientos más preocupantes ocurridos en el 2016, como efectos del cambio climático:
Cinco son los sectores sobre los cuales se evalúa el nivel de gases invernaderos para los inventarios: Uso del suelo y cambio del uso, agricultura y ganadería, energía, residuos, y otros procesos industriales. En el país, los sectores que más gases de efecto invernadero emite son el de la ganadería y del cambio de uso de suelo, puesto que son nuestras principales actividades económica.
“Pero no debemos mirarlo aislado, el cambio climático no es solo medio ambiente. Nuestro objetivo es que el desarrollo económico siga desenvolviéndose sin afectar nuestra seguridad alimentaria”, explicó la directora de la Oficina de Cambio Climático.
Teniendo en cuenta el nivel de exposición al cambio climático, más sensibilidad que tiene la población y restando por la capacidad de adaptación de cada población, se calcularon los niveles de vulnerabilidad al cambio climático de cada localidad. Esta dependencia de la Seam realizó un mapeo con esos datos y Caazapá lidera la lista como el departamento más vulnerable. Concepción, Canindeyú, Caaguazú e Itapúa le siguen, con una calificación de alta vulnerabilidad.
“Caazapá posee un gran índice de pobreza, lo cual también determina la vulnerabilidad de una población. Además, se tuvo en cuenta la densidad poblacional”, explicó Estigarribia. Por otra parte, señaló que en este departamento, se está trabajando con una asociación llamada Santa María, donde, mediante el uso de la tecnología se mejoró las condiciones de los secaderos de almidón, por lo que ya no dependen del clima para poder producir, y de esa manera forman sus planes de adaptación.
“Eso también es adaptación al cambio climático, poder proveer de tecnología a una comunidad. Antes, para secar al almidón solo podían hacerlo al sol pero hoy gracias a la tecnología pueden producir en cualquier horario y época del año. Así, las localidades podrán estar preparada para los eventos climáticos”, detalló.
Asimismo, señaló que, en un mismo departamento, existen localidades muy vulnerables y otras con menor índice, debido a las capacidades de adaptación al cambio climático. Boquerón es el único distrito que posee un plan de adaptación local en nuestro país. Filadelfia, Loma Plata e Irala Fernández están en pleno proceso de adaptación en la actualidad.
Próxima semana: Planes de adaptación nacional y planes para gobiernos locales.