Opción sexual

Uno de los mayores sufrimientos de las personas es la discriminación debido a su sexualidad. Desde un punto de vista psicológico y sexológico, la elección es una cuestión íntima y privada de cada ser humano. Un experto responde.

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¿Una persona es homosexual debido a la crianza que recibió, el ambiente en el cual creció o la hormonas tienen influencia? El especialista afirma que cada persona descubre por sí misma esta inclinación sexual, por lo general durante la adolescencia. La opción sexual conlleva sufrimiento en muchos casos. El magíster Ariel González Galeano, psicólogo clínico y sexólogo, afirma que “ser homosexual es una variable y posibilidad más dentro de las expresiones comportamentales de la sexualidad y no constituye ninguna enfermedad desde el punto de vista científico”.

“Se caracteriza por la atracción erótico-afectiva de un individuo hacia otra u otras personas del mismo sexo. Pueden existir personas que tienen contacto sexual con otras de su mismo sexo y lo asumen, y también aquellas que desarrollan conductas homosexuales, pero que no se asumen como homosexuales o gays. Así también se encuentran las que se asumen homosexuales, pero no implementan conductas homosexuales”, señala.

Indica que “en ese sentido, la orientación homosexual es también una cuestión identitaria de cada ser humano, que se descubre generalmente durante la adolescencia; a diferencia de la identidad sexual en sí (sentirse hombre, mujer o no sentirse así), que incluso se desarrolla ya desde la primera infancia”.

“Existen diversas teorías sobre el por qué o el origen de las personas homosexuales, si influyen las hormonas, o la crianza, o el ambiente, etc. Hoy en día, desde la sexología decimos que sí influyen, pero que no determinan la orientación sexual homosexual. La orientación homosexual (así como otras orientaciones sexuales) es algo que cada persona va descubriendo por sí misma (en ese sentido se podría afirmar que se nace homosexual), algunas personas lo asumen, otras no. Desde un punto de vista psicológico y sexológico, es una cuestión íntima, privada y subjetiva de cada ser humano”, enfatiza.

Apunta el licenciado que “en sociedades donde existe poca o mala educación sexual, muchas personas desarrollan fobias a las personas homosexuales o a cualquier expresión conductual entre personas del mismo sexo; aquellas personas que saben lo que les gusta y tienen una adecuada conciencia sexual, no se inquietan, ni se asustan ante lo diferente”.

¿Son reprimidos?

El Lic. González Galeano refiere que “en relación con la persona homosexual reprimida, su psicología es de mucho sufrimiento, autoestima disminuida, conflictos de relacionamiento interpersonal y problemas en su respuesta sexual”.

“Muchas veces se manifiesta externamente de manera violenta hacia otras personas que sí se asumen, y en muchos casos, la represión es tal que incluso se desarrollan cuadros depresivos que podrían llevar hasta intentos suicidas. Todo por el intenso rechazo que genera en sí mismo ser homosexual y no asumirse”, finaliza.

Recomendaciones

El Lic. González Galeano aconseja implementar algunos pensamientos y actitudes.

* Desarrollar estrategias educativas basadas no solo en aspectos religiosos o espirituales que pueden ser relevantes o no para cada familia, sino incluir en toda la sociedad nociones científicas, de manera integral y adecuada, para cada etapa evolutiva.

* Basarse en valores fundamentales de la convivencia como el respeto, la afectividad y la dignificación de la persona.

* Se evitará la consideración o clasificación por el tipo de orientación sexual que posea.

* El respeto es esencial y relevante hacia todos los seres humanos.

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