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En 2018, Abdo Benítez recibía la administración del país de la mano del entonces presidente Horacio Cartes, quien durante los cinco años de gestión (2013-2018) no atravesó mayores sobresaltos en materia económica. De hecho, en ese período Paraguay se destacó como uno de los pocos países de América Latina con una expansión económica en medio de una ola de recesión en la región.
Durante el mandato de Cartes, el Producto Interno Bruto (PIB) creció en promedio 4,1%. El Índice de Precios al Consumidor (IPC) osciló entre el 3,1% y 4,5%, ubicándose dentro del rango meta de inflación del Banco Central del Paraguay (BCP).
Las buenas condiciones macroeconómicas se tradujeron en otros indicadores, como un importante crecimiento de 62% en la ejecución de obras públicas entre el 2013 y 2018. Estos proyectos de infraestructura fueron financiados con endeudamiento principalmente. El buen desempeño económico de Paraguay atrajo a inversores en los mercados financieros internacionales. El apetito por los títulos soberanos se reflejó en tasas y plazos.
El dinamismo económico con el crecimiento de los ingresos de las personas mejoró la tasa de pobreza en el país, que pasó de 28% de la población paraguaya a 24% al cierre de 2018.
El tipo de cambio fue otro indicador que acompañó el periodo de Horacio Cartes. Pese a algunos eventos de inestabilidad a nivel regional e internacional, no sufrió bruscas fluctuaciones.
La intervención del BCP para reducir la volatilidad, así como el buen desempeño de los sectores económicos del país, como el agrícola, mantuvieron la cotización estable.
En esa línea, el promedio de la tasa de cambio se ubicó en G. 5.218 por cada dólar en el periodo agosto 2013 a julio de 2018.
Además, importantes leyes que habían sido diseñadas en el gobierno de Federico Franco fueron aprobadas e implementadas desde el 2013. Tal es el caso de la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF), Impuesto a las Rentas de las Actividades Agropecuarias (IRAGRO) y la Ley Nº 5102/13 “De Promoción de la Inversión en Infraestructura Pública y Ampliación y Mejoramiento de los Bienes y Servicios a cargo del Estado” o de Alianzas Público-Privadas.
En síntesis, el gobierno de Cartes no sufrió los embates de una sequía, ni de expectativas desfavorables por parte de los agentes económicos. También contó con una mayoría parlamentaria y relativa estabilidad a nivel mundial, que generaron un escenario ideal durante los cinco años de su mandato, salvo la crisis política desatada con sus intenciones de reelección como presidente de la República.
El 15 de agosto de 2018, Mario Abdo Benítez recibía la presidencia de Paraguay con auspiciosos indicadores entre los que se destacan estabilidad macroeconómica, inflación controlada, aumento sostenido de las obras públicas y un nivel de endeudamiento sostenible, entre otras condiciones.
¿Qué hechos económicos marcaron la gestión de Mario Abdo Benítez? ¿Cuáles han sido los aciertos durante su mandato? ¿Cuáles son las perspectivas y desafíos de este gobierno durante el reconfigurado escenario causado por la pandemia? ¿Qué reformas podrían reacomodar el funcionamiento del Estado?
En la presente edición, la consultora MF Economía, presenta, describe y analiza estos y otros puntos al cumplirse dos años de gestión del presidente de la República, Mario Abdo Benítez.
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