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TECNOLOGÍA
El sistema de riego utilizado es por goteo, para evitar problemas de bacterias. Esta variedad de tomate necesita la aplicación de una hormona para mejorar la fecundación.
Generalmente, se dejan cinco a seis frutas por planta para unificar la madurez.
En cuanto a la plantación, una vez que crece, las plantas pueden llegar a los 10 o 12 m de largo. Para evitar que caigan a un lado u otro, se colocan alambres a un metro de altura, que actúan como tutores que sostienen a las plantas.
RENDIMIENTO
El rendimiento depende de las condiciones climáticas y sanitarias que se presenten. En algunos casos aparecen problemas fitosanitarios; en otros, el extremo calor o incluso la poca humedad relativa (poca agua). Pese a ello, se obtiene entre 150.000 a 200.000 kg por ha.
El híbrido Trofeo es de larga vida y tiene una cutícula más gruesa, que permite guardar las frutas hasta un mes después de la cosecha. De esta manera, es posible consumirlo o trasladarlo de un lugar a otro para la comercialización.
FERTILIZACIÓN
La labor de fertilización es imprescindible debido a que el cultivo es muy exigente. Previamente a la siembra, es necesario agregar al suelo estiércol bovino y gallinaza. Posteriormente, se pueden agregar productos químicos de formulación 15-15-15.
Cuando empiezan a aparecer las primeras frutas, se realiza el fertirriego.
Es importante hacer un cálculo para saber cuánto nutriente aprovechó el suelo a fin de reponer el faltante y no empobrecerlo. Habitualmente se usan nitrato de calcio, nitrato de potasio, ácido fosfórico y otros micronutrientes. En verano, generalmente, se hace una fertilización vía foliar.
CARENCIA
Se refiere al periodo comprendido entre la última aplicación de fertilizantes y la cosecha. El periodo de carencia debe tenerse muy en cuenta para evitar intoxicaciones en el consumidor. Por ello, es recomendable seguir las indicaciones técnicas de un profesional experto en horticultura.
RECOMENDACIÓN
Antes de iniciar algún emprendimiento hortícola, es necesario determinar el mercado al cual irá destinada la cosecha, a fin de evitar la pérdida de capital, y mucho más si se refiere a zonas como el Chaco, donde el clima es hostil. La recomendación también debe hacerse respecto al uso de los productos fitosanitarios. No es recomendable utilizar el mismo producto en forrajes y en las huertas. Cada cultivo requiere de productos específicos. De esta manera, se pretende evitar problemas para la salud.
(*) Especialista en Producción Hortícola – Chaco Central