La adecuada preparación de suelo es fundamental para el buen desarrollo del cultivo. La densidad de siembra es de 3 kilogramos por hectárea a chorrillo, en surcos distanciados de 70 a 80 centímetros entre sí.

La germinación ocurre a los 3 a 7 días después de la siembra. Debido a su crecimiento inicial lento se debe realizar una carpida en los primeros 30 días con aporque.

Durante la fase de crecimiento vegetativo y en los primeros días de floración, podría aparecer un ataque de pulgones, por lo que se debe controlar. La floración ocurre entre los 50 y 70 días de crecimiento; la flor es de coloración blanquecina con 5 pétalos; cada flor dura 1 día y la polinización ocurre en las tres primeras horas; la floración dura hasta la maduración de las cápsulas. En cada yema floral se presentan 1 a 2 cápsulas, el número de cápsulas por planta es variable, y es de 90 a 160 cápsulas. Como característica de las plantas de días cortos, la cosecha se realiza entre los 115 y 130 días.

Al llegar el periodo de maduración, las cápsulas y las hojas de las plantas cambian de color verde a verde amarillento, y cuando está más avanzada la maduración se abren las cápsulas inferiores. Cuando llegan a este punto, se cortan las plantas y se arman macillos que deben ser secados en el campo durante 15 días, y luego se procede a sacar las semillas de las cápsulas. Se secan durante 2 días al sol, y luego se embolsan. El sésamo constituye un cultivo de muy fácil desarrollo, pero requiere de algunos cuidados culturales, tanto en la fase vegetativa como en la cosecha. A fin de lograr un buen rendimiento y obtener una buena calidad de la semilla, debemos tener presente los siguiente factores.

Epoca de siembra

La mejor época de siembra se constituye a partir de octubre hasta fines de noviembre. Es importante respetar la época de siembra, ya que de ella depende en gran medida el rendimiento y la calidad de la semilla.

Preparación de suelo

Un mes antes de la siembra se debe realizar una rastreada profunda. Se deja que el rastrojo existente se pudra y luego se pasa una rastra, momentos antes de la siembra se pasa por segunda vez la rastra. Es importante que el suelo quede bien mullido, libre de terrones grandes. La buena preparación del suelo asegura una buena germinación y un buen control de las malezas invasoras.

Siembra

La densidad de siembra recomendada para el sésamo es de 3 a 4 kilogramos de semilla por hectárea.
El sésamo es necesario sembrarlo en líneas espaciadas, 80 cm. entre sí, a fin de que se pueda desarrollar vigorosamente, y además para poder realizar las carpidas necesarias. La distancia entre plantas deberá ser de 5 a 10 por metro lineal. Esta planta se puede sembrar en forma manual realizando surcos o por medio de sembradoras de chorrillo o la manual que se emplea para la zanahoria o la alfalfa. Aquellos que poseen tractor pueden utilizar la sembradora a chorrillo calibrando a cero, en todo caso, es muy importante sembrar en líneas.

La profundidad de siembra ideal es de 2 cm. Es importante tener en cuenta, que la semilla del sésamo es muy pequeña, por lo tanto, a mayor profundidad la germinación va a ser perjudicial; tampoco hay que dejarla al descubierto, la profundidad no debe ser menor a 1 cm. Recordar que la profundidad de una semilla en siembra debe ser enterrada no más a 2 veces su tamaño.

Cosecha

La cosecha se realiza cuando las cápsulas donde están las semillas comienzan a abrirse. La abertura de las cápsulas es de abajo hacia arriba. Las plantas presentan un amarillamiento total, y las hojas inferiores se desprenden. Las plantas en estas condiciones se cortan con machete o guadaña o con máquina que corta y ata. Para la cosecha manual, las plantas se atan en fardos de 15 a 20 cm. de diámetro y luego se juntan varios fardos, de 4 a 5, hasta formar una parva, este último paso es igual a la cosecha mecánica.

Una vez emparvado se deja en la chacra por una o dos semanas hasta que las plantas estén bien secas y las cápsulas abiertas, luego las parvas se giran en sentido contrario, es decir, las cápsulas miran hacia el suelo y las semillas caen directamente sobre una lona o carpa. Para una mejor recolección se deberá batir las plantas con la ayuda de un palo. Las semillas se deben extender por un día sobre la carpa con un espesor de 2 a 3 cm., para que se sequen, posteriormente se sacan los cuerpos extraños con una zaranda o con viento; se embolsa y se almacena en un lugar bien aireado.

Cuidados culturales

Durante la fase del cultivo, el sésamo necesita dos carpidas como mínimo. Primera carpida a los 15 días después de la germinación, y la segunda a los 30 a 45 días, después de la germinación con aporque. Las carpidas son muy necesarias, ya que al inicio es de crecimiento lento, y las malezas pueden perjudicar severamente el rendimiento.

Control de plagas y enfermedades

En general no presenta problemas de plagas y enfermedades, aunque se ha observado presencia de pulgones que pueden afectar el rendimiento; el control se realiza con cualquier insecticida sistemático, de contacto e ingestión. No está permitido utilizar insecticida clorado.

Fuente: FCA UNA