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Nadie podría poner en dudas el legado de su repertorio en la historia del pop rock latino. Con canciones como Rayando el sol, Vivir sin aire, Déjame entrar y En el muelle de San Blas, la agrupación mexicana Maná se adueñó —a lo largo de las últimas décadas y en todo el continente— de los charts de estaciones de radio y cadenas musicales de tevé.
En su más reciente producción, Cama incendiada (2015), el grupo apuesta a nuevas fusiones e incorpora colaboraciones con artistas, como la popular estrella pop Shakira, y el reconocido DJ y productor estadounidense Steve Aoki.
La marca de la gloria de Maná quedó registrada el pasado miércoles 10 cuando, presentados por la legendaria figura de Carlos Santana (68), recibieron su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood en las calles Boulevard y Vine Street. “Yo, realmente, no soy muy afecto a los premios y las condecoraciones”, asegura el cantante a ABC Revista. “Personalmente, a mí no me gusta. Yo creo más en hacer música y tener más los pies en la tierra. (...) Soy un poco reaccionario a eso”, reitera.
De esta forma, la agrupación mexicana se sumó a otros privilegiados artistas latinos con tal reconocimiento, como Luis Miguel, Celia Cruz, Shakira, Marco Antonio Solís, Ricky Martin, Emilio Estefan, entre otros.
“No me gusta tampoco hablar mal...”, acota, sobre el honor. Es momento, entonces, de una anécdota que recuerda con emoción. “Nosotros empezamos en Los Ángeles. Nuestro primer concierto fue con 400 personas. Yo sabía que ahí había una cosa que iba a explotar duro y que nosotros íbamos a tener empatía con toda la gente de ahí. Hasta ahora Los Ángeles es la ciudad más importante para Maná en el mundo, en cuanto a número de tickets y el movimiento social que tenemos. Entonces, me da mucho gusto y es un agradecimiento a todos los fans que les latió la banda, que se aliaron a la banda, y que estamos ahí con ellos y ellos con nosotros”.
-Cama incendiada es el disco que promocionan en esta gira. ¿Cómo presentarías, en pocas palabras, este álbum?
-Es un disco “parteaguas” (N. de R.: punto o evento a partir del cual alguna situación cambia) porque es el primer disco que nos produce una persona fuera de nosotros (George Noriega). Nos acostumbrábamos a producir los discos siempre entre nosotros, hace veintitantos años, y esta vez llamamos a alguien para que manejara el barco. Le dimos el timón de la nave: llegamos a nuevos lugares, nuevas playas, digamos, entonces yo estuve componiendo junto con él (Noriega) y creo que ha sido —artísticamente hablando— un hito muy diferente, con una energía nueva a Maná en esta Cama incendiada.
-Una de las curiosidades del disco es Mi verdad, que cuenta con la colaboración de Shakira. ¿Cómo fue concretar el dueto y qué les pareció el resultado?
-Fue una forma bien natural. La canción ya la habíamos terminado. La íbamos a hacer sin dueto, pero a George le latió mucho la idea de hacer un dueto con Shakira, que es buena amiga. Yo le hablé, me dijo que estaba superembarazada (de siete meses), pero aún así me dijo: “Mándame la canción”, y al otro día me dijo que se le habían caído las lágrimas a ella y a su esposo, Gerard (Piqué), y que le encantaba el tema y que lo grababa. Entonces, le mandamos el tema, ella lo grabó en Barcelona. Lo regresó a Miami y, cuando lo oí, dije: “¡Wow!”. Fue un sentimiento increíble, porque, además, es un tema que habla acerca de cualquier relación..., pero también de los hijos, ¿no?
-Otra curiosidad también muy bien recibida es La prisión, una versión electrónica con Steve Aoki. ¿Cómo surgió la idea?
-La prisión, de por sí, tenía un sonido un poco electrónico... Estaba coqueteando con lo electrónico, de alguna manera. Pero luego conocí a un amigo, Steve Aoki, y le presento el tema, le encantó, y dijo que quería hacerlo. ¡Y a mí me encantó cómo quedó! Nunca hemos explorado tanto lo electrónico, pero es como te digo: mientras más plasticidad tengas en la creatividad, el arte, pues te lleva... Es bueno intentarlo, es bueno explorarlo. Entonces creo que esas fueron buenas ideas y me dejaron contento. Y a los chicos les ha gustado también.
-Este disco también tiene algunos pasajes muy interesantes en cuanto a la lírica y el contenido social. Somos más americanos parece hablar directamente de la comunidad latina en EE. UU. y de la polémica con la campaña electoral de Donald Trump...
-Es cosa chistosa: cuando estaba acabando la letra de Mi verdad, tuve contacto con unos venezolanos que estaban muy preocupados. Uno de ellos estaba en la cárcel porque era prisionero político. Luego tuvimos contacto con la esposa de Leopoldo López (Lilian Tintori); y estamos en una campaña frontal ya contra el gobierno de Maduro, porque nos parece dictatorial y es raro eso... al menos así de descarado. Porque dictaduras tenemos muchas, disfrazadas, como la de México, pero intentamos poner nuestro grano de arena.
Con los Estados Unidos ha sido una lucha desde hace 20 años de pelear por los derechos humanos de los latinos e indocumentados. Estuvimos con el presidente Barack Obama, también con Hillary Clinton —hace como ocho años— y hemos trabajado mano a mano con organizaciones tratando de unir a todos los latinos para que hagan un peso, que ya lo han logrado. Prácticamente ellos le dieron el ‘gane’ en las elecciones a Barack Obama... Entonces, ahora surge este personaje —que yo considero bastante extraño, que no tiene nada que ver con la política, más bien con la farándula y bienes raíces—. Pero, aparte de eso, ¡de política es muy ignorante! Es una persona con mucho coraje, mucho odio. Respecto a eso hemos hecho una campaña en contra de su candidatura, porque no creemos que sea beneficioso para los latinos ni para los mexicanos ni el mundo entero que el país más poderoso del mundo tenga a un loco que hace discursos del tamaño de Hitler, de esta carga de racismo y odio.
-La palabra de ustedes también tiene mucha fuerza en México. ¿Sintieron alguna vez que corrían peligro por dar a conocer su voz?
-No... mira, yo creo que no. Aquí, en Ayotzinapa fue un caos muy lamentable lo de los 43 normalistas y nos manifestamos, como muchos mexicanos, y yo creo que ese tipo de gobiernos ya pasó. No tenemos uno como el de hace 20 o 30 años, que era muy represivo, muy reaccionario. Pero ahora ya, al menos, toleran eso..., es un poco su estrategia no hacer mucho caso y seguir haciendo sus estupideces, sus tonterías y corrupción, etcétera. Eso existe en todos lados: tu país, el Paraguay, también sufrió muchísimo de dictaduras y también sufre de corrupción, al igual que México. En el Paraguay también estamos bastante mal en eso, pero pues la propuesta de Maná es unir a la sociedad civil, que ya tiene una palabra, una voz, que le dio las redes sociales y a través de eso tratar de cambiar las cosas. Incluso gobiernos, si es necesario.
-¿Qué otras cosas te inspiran hoy?
-Yo tengo un par de niños y siempre he tratado de velar por los derechos humanos, desde antes que tuviera hijos, son cosas que surgen. Maná no es nada más que eso, también hablamos de sensualidad (hablamos mucho en este disco). Es un disco sexy en algunas áreas, es un disco también que proyecta un poco la ilusión de querer estar mejor, de querer liberarse. Es un tópico de la liberación importante en este disco y también trae a colación, pues, una relación que tuve —amorosa— con un poquito de problemas y conflictos, ¿no? Pero bueno, así es la vida y se va escribiendo lo que se siente.
-Carlos Santana los acompañó en la ceremonia del Paseo de la Fama de Hollywood. ¿Qué vínculo tienen con él?
-Sí, con Santana hemos tenido siempre una admiración, respeto. Él tiene una calidad de persona impresionante. Una persona muy humilde, con mucha humanidad y un talento increíble. Él fue de los pioneros que hicieron el rock latino. Él es nuestro maestro, de todos los que hacemos este tipo de rock mestizo. Cuando estaba ‘chavito’ —imagínate tú— alucinaba con Santana y él vivía en Jalisco, aquí cerquita, como a 200, 300 km de mi ciudad. Yo tenía la ilusión de conocerlo algún día. Platicamos con su papá y nos dijo: “No, ‘mijo’, ya está en San Francisco”. Era mi ilusión y, mira, cuando algo lo decretas, sucede. Pasaron muchos años y me invitó Carlos a su disco Supernatural (1999) y me acuerdo que ese disco Carlos pensó que iba a vender medio millón de copias... ¡y fueron 37 millones! Ahí tengo una canción con él, Corazón espinado. Han sido unas experiencias muy padres.
-Con Maná existe una pasión muy particular en el Paraguay. De hecho, el show de 2007 marcó un momento especial porque sacudió la escena de conciertos. ¿Qué recuerdos tenés del público local?
-Bueno, yo tengo algunos recuerdos... Me acuerdo que había un estadio de fútbol muy lleno (el Defensores del Chaco); 50.000, 60.000 personas. Había un entusiasmo impresionante, una entrega de la gente... Fue toda una fiesta eso. Me acuerdo que nos fuimos a una fiesta y ahí una chica (N. de R.: La modelo Sandra Michelón, hoy casada con un empresario en España, llegó a declarar a la prensa del corazón haber pasado la noche con el cantante) —que ya ni me acuerdo quién era— inventó una historia (risas). ¡Me estaba metiendo en problemas! Pero no me metió en problemas porque no había tal...
-Entonces desmitificamos eso: fue totalmente falso...
-Más o menos... ¡más o menos falso! (risas).
-¿Qué podés adelantar del show en Asunción?
-Es un show muy caliente. Es un espectáculo muy versátil... Tenemos temas desde los primeros discos de Maná, que a la gente le encanta; los del medio, los de ahorita... ¿me entiendes? Es como ir caminando por la historia de Maná, en sus discos, ¿no? Tenemos un show bien abundante y muy potente. Tiramos toda la carne al asador, tanto en las canciones como en producción. ¡La producción es espléndida también! Son como 80 ton. de equipo. Va todo para Paraguay, Argentina y Chile. Lo mismo que ves en Nueva York o Los Ángeles, lo ves ahí.
-Si en algún momento te encontraras en un libro de biografías, ¿qué frase te gustaría que resuma la vida de Fher Olvera?
-(Piensa). ¡Ay, cabrón! (vuelve a pensar). “Pasión a tope”.
Sepa más
Maná en Paraguay
Fecha: jueves 18 de febrero. Hora: 21:00. Lugar: Club Olimpia. Avenida Mariscal López, Asunción.
Entradas: entre G. 155.000 y 1.300.000, a la venta en la Red UTS.