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Pai róga
El Palacio Episcopal asunceño cuando era residencia del obispo diocesano de la Provincia Eclesiástica del Paraguay, hoy Arzobispado de Asunción fue construido por disposición del Gobierno nacional, a finales del siglo XIX.
El 1 de julio de 1897 fue sancionada y promulgada una ley por la que se dispuso la construcción del edificio como sede del Obispado del Paraguay. Casi dos años después, el 23 de marzo de 1899, se conformó, por decreto del Poder Ejecutivo, una comisión especial para llevar adelante la dirección de los trabajos y la administración de los fondos proporcionados por el Gobierno nacional.
Esa comisión estuvo presidida por don Higinio Uriarte García del Barrio, expresidente de la República quien vivía en las cercanías actual esquina de Presidente Franco e Independencia Nacional. Integraban la comisión el presbítero Antonio Scarella, como secretario; Manuel Solalinde, como tesorero y vocales, el presbítero José Natalicio Rojas y don Santiago Zambonini.
Inicialmente, el Gobierno otorgó 50.000 pesos fuertes para empezar los trabajos.
Los Urdapilleta
En 1808 llegó al Paraguay un oficial de artillería y maestro constructor llamado Pascual Urdapilleta Gutiérrez. Había nacido hacia 1785 en Sayás, Vizcaya, España. A poco de llegar formó familia con doña María Cesárea Carísimo Haedo, en 1809.
Tuvo activo protagonismo en los hechos que desembocaron en la emancipación política de nuestro país, en esos días: fue uno de los 200 participantes del Congreso General que resolvió jurar obediencia al Consejo de Regencia de España y mantener correspondencia y amistad con la Junta de Buenos Aires.
Cuando las fuerzas bonaerenses comandadas por Manuel Belgrano invadieron el Paraguay para forzar la independencia paraguaya, don Pascual participó en las batallas del lado paraguayo y fue el que comandó el cuerpo de Artillería del Ejército provincial que derrotó a las fuerzas porteñas del general Manuel Belgrano, en Tacuary, el 9 de marzo de 1811.
Durante la dictadura francista, conoció la prisión y estuvo a punto de ser fusilado; la muerte del dictador evitó tal circunstancia. Durante el gobierno del Presidente Carlos A. López, fue un destacado constructor de importantes edificios y obras públicas, como el edificio del Congreso Nacional y la Catedral de Asunción, diseñados y ejecutados por él. Falleció en Asunción, el 11 de julio de 1856.
Descendiente suyo fue don José Urdapilleta, nacido en Asunción en febrero de 1846. Estudió en Asunción, y tenía 19 años cuando estalló la Guerra de la Triple Alianza, y se alistó en la Marina, donde llegó al grado de Teniente.
Peleó en Curupayty y fue uno de los que participaron en los intrépidos abordajes de los acorazados. Posteriormente actuó en otras acciones hasta la campaña de Pikysyry. Cayó prisionero en Angostura, pero, en desacuerdo con la capitulación, envolvió una bala de cañón con la bandera paraguaya y la arrojó al río, para que no cayera en manos enemigas.
De sólida cultura, fue uno de los protagonistas de la reconstrucción del país en la posguerra. Actuó en política y fue miembro del Club del Pueblo, entidad política fundada en la inmediata posguerra.
Presidió la Junta Económico-Administrativa de Asunción y, en 1871, fue electo diputado nacional. Durante el gobierno del presidente Juan Bautista Gill ocupó el Ministerio del Interior. También le cupo importante actuación en la defensa de los intereses paraguayos ante el Brasil.
En el gobierno del presidente Higinio Uriarte fue confirmado en el cargo. En 1889 fue miembro del primer Consejo Secundario y Superior, el mismo que tuvo a su cargo la instalación de la Universidad Nacional de Asunción.
Connotado miembro de la masonería paraguaya, durante el gobierno del presidente Emilio Aceval fue designado, en 1898, ministro de Hacienda, hasta el 11 de junio de 1900. Falleció en Asunción, en abril de 1902. Sobrino suyo fue el historiador, ministro e intendente asunceño Juan Emiliano OLeary Urdapilleta. También fue su pariente el poeta José Luis Appleyard Urdapilleta.
Personaje pintoresco
Un personaje que pasó a ocupar un importante sitio en la picaresca paraguaya es, indudablemente, el alférez Ñanduá.
Su nombre era Miguel Brítez y había nacido en el paraje Ñanduá de Yaguarón. Actuó en la Guerra de la Triple Alianza, y se cuenta de él un rico anecdotario y aforismos.
Había caído prisionero de los Aliados en Uruguayana, pero huyó de sus captores y se unió nuevamente al Ejército paraguayo. Se cuenta que era muy apreciado por el mariscal Francisco S. López.
El Palacio Episcopal asunceño cuando era residencia del obispo diocesano de la Provincia Eclesiástica del Paraguay, hoy Arzobispado de Asunción fue construido por disposición del Gobierno nacional, a finales del siglo XIX.
El 1 de julio de 1897 fue sancionada y promulgada una ley por la que se dispuso la construcción del edificio como sede del Obispado del Paraguay. Casi dos años después, el 23 de marzo de 1899, se conformó, por decreto del Poder Ejecutivo, una comisión especial para llevar adelante la dirección de los trabajos y la administración de los fondos proporcionados por el Gobierno nacional.
Esa comisión estuvo presidida por don Higinio Uriarte García del Barrio, expresidente de la República quien vivía en las cercanías actual esquina de Presidente Franco e Independencia Nacional. Integraban la comisión el presbítero Antonio Scarella, como secretario; Manuel Solalinde, como tesorero y vocales, el presbítero José Natalicio Rojas y don Santiago Zambonini.
Inicialmente, el Gobierno otorgó 50.000 pesos fuertes para empezar los trabajos.
Los Urdapilleta
En 1808 llegó al Paraguay un oficial de artillería y maestro constructor llamado Pascual Urdapilleta Gutiérrez. Había nacido hacia 1785 en Sayás, Vizcaya, España. A poco de llegar formó familia con doña María Cesárea Carísimo Haedo, en 1809.
Tuvo activo protagonismo en los hechos que desembocaron en la emancipación política de nuestro país, en esos días: fue uno de los 200 participantes del Congreso General que resolvió jurar obediencia al Consejo de Regencia de España y mantener correspondencia y amistad con la Junta de Buenos Aires.
Cuando las fuerzas bonaerenses comandadas por Manuel Belgrano invadieron el Paraguay para forzar la independencia paraguaya, don Pascual participó en las batallas del lado paraguayo y fue el que comandó el cuerpo de Artillería del Ejército provincial que derrotó a las fuerzas porteñas del general Manuel Belgrano, en Tacuary, el 9 de marzo de 1811.
Durante la dictadura francista, conoció la prisión y estuvo a punto de ser fusilado; la muerte del dictador evitó tal circunstancia. Durante el gobierno del Presidente Carlos A. López, fue un destacado constructor de importantes edificios y obras públicas, como el edificio del Congreso Nacional y la Catedral de Asunción, diseñados y ejecutados por él. Falleció en Asunción, el 11 de julio de 1856.
Descendiente suyo fue don José Urdapilleta, nacido en Asunción en febrero de 1846. Estudió en Asunción, y tenía 19 años cuando estalló la Guerra de la Triple Alianza, y se alistó en la Marina, donde llegó al grado de Teniente.
Peleó en Curupayty y fue uno de los que participaron en los intrépidos abordajes de los acorazados. Posteriormente actuó en otras acciones hasta la campaña de Pikysyry. Cayó prisionero en Angostura, pero, en desacuerdo con la capitulación, envolvió una bala de cañón con la bandera paraguaya y la arrojó al río, para que no cayera en manos enemigas.
De sólida cultura, fue uno de los protagonistas de la reconstrucción del país en la posguerra. Actuó en política y fue miembro del Club del Pueblo, entidad política fundada en la inmediata posguerra.
Presidió la Junta Económico-Administrativa de Asunción y, en 1871, fue electo diputado nacional. Durante el gobierno del presidente Juan Bautista Gill ocupó el Ministerio del Interior. También le cupo importante actuación en la defensa de los intereses paraguayos ante el Brasil.
En el gobierno del presidente Higinio Uriarte fue confirmado en el cargo. En 1889 fue miembro del primer Consejo Secundario y Superior, el mismo que tuvo a su cargo la instalación de la Universidad Nacional de Asunción.
Connotado miembro de la masonería paraguaya, durante el gobierno del presidente Emilio Aceval fue designado, en 1898, ministro de Hacienda, hasta el 11 de junio de 1900. Falleció en Asunción, en abril de 1902. Sobrino suyo fue el historiador, ministro e intendente asunceño Juan Emiliano OLeary Urdapilleta. También fue su pariente el poeta José Luis Appleyard Urdapilleta.
Personaje pintoresco
Un personaje que pasó a ocupar un importante sitio en la picaresca paraguaya es, indudablemente, el alférez Ñanduá.
Su nombre era Miguel Brítez y había nacido en el paraje Ñanduá de Yaguarón. Actuó en la Guerra de la Triple Alianza, y se cuenta de él un rico anecdotario y aforismos.
Había caído prisionero de los Aliados en Uruguayana, pero huyó de sus captores y se unió nuevamente al Ejército paraguayo. Se cuenta que era muy apreciado por el mariscal Francisco S. López.