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A sus 50 años de edad, volvió a la ciudad que lo vio nacer, acompañado de su familia que vive en Cali, Colombia. Alejado de las canchas y dedicado a los negocios inmobiliarios, el excrack de la Albirroja tiene deseos de volver definitivamente a Paraguay.Roberto Cabañas, gran ídolo del fútbol nacional, regresó a su ciudad natal tras casi una década de ausencia. Relató su exitoso paso por los campos de juego de todo el mundo. Recordó sus inicios, la oportunidad de jugar con Pelé y Diego Maradona, y la esperanza de continuar con la dinastía Cabañas en el fútbol a través de sus hijos.
La arenosa calle Colón, en la ciudad de Pilar, vio nacer la historia de este excepcional futbolista. "Jugaba en la arena con mis hermanos y amigos de infancia. Como éramos muy pobres, nuestra pelota era de trapo o utilizábamos frutas de naranja y limón", recuerda.
Radicado actualmente en Cali, Colombia, y casado hace 16 años con Tatiana Zawadzky, una hermosa exmodelo y reina de belleza colombiana, llegó al Paraguay tras observar la Copa América en Argentina.
Negocios
Cabañas, actualmente dedicado a actividades empresariales, sigue vinculado al fútbol a través de dos de sus hijos. María Antonia, de 8 años, y Daniel, de 13, que entrena en la filial del Barcelona en Buenos Aires y en la Selección paraguaya Sub 13. Según Roberto, además de un físico privilegiado, tiene una técnica perfeccionada, con grandes posibilidades de triunfar. Manifestó que los dirigentes del afamado club español ya deseaban adquirir su pase, pero él estimó que era necesario esperar un poco más. "Como padre y paraguayo, me encantaría verle jugar por nuestra Selección, pero esa será una decisión de Daniel, quien deberá nacionalizarse para hacerlo", aclara.
Rememora que en su caso fue un torneo estudiantil el que le abrió las puertas al éxito. Roberto tenía 14 años cuando lograron un título nacional con la Selección de la ciudad de Pilar. "Ganamos el torneo y me consideraron el mejor jugador".
A esa edad debutó en la Primera de Capitán Bado, marcando dos goles al clásico rival, América. Jugó en el club pilarense un año más y con 15 años fue a préstamo al Mariscal López, de Alberdi, entidad que le dio la posibilidad de mostrarse ante los grandes de la capital.
"Jugamos contra Sol de América, Olimpia y Cerro Porteño, y hasta le convertí un gol a (Roberto) Gato Fernández", acota. Esto llamó la atención de los dirigentes de fútbol asuncenos y los de Cerro Porteño manifestaron la intención de adquirir su pase.
"Las gestiones fueron muy difíciles, ya que el Capitán Bado pedía mucho por mí en ese momento. Pedir 2.000.000 de guaraníes en esa época (año 1975) era una suma demasiado importante por un desconocido futbolista pilarense", resalta.
Finalmente, los azulgranas hicieron un esfuerzo del que no se arrepintieron. Seis meses después, los de Barrio Obrero transferían a Roberto al Cosmos de Nueva York, con la cotización más alta registrada en ese entonces por la venta de un futbolista paraguayo, 850 mil dólares americanos.
Carrera futbolística
Entre los hechos que marcaron su vida deportiva, Cabañas recuerda el abrazo de Pelé al recibirlo en el Cosmos. "Era un sueño estar con el rey del fútbol". Posteriormente, quedó impresionado por el cariño de la hinchada del Boca Juniors, en Argentina, que lo tenía como uno de sus máximos ídolos. Roberto Cabañas fue campeón y goleador con el club más popular de la Argentina. "La gente de Boca me adoraba y hasta hoy me respeta, porque yo era el tipo de jugador que gustaba a la hinchada. Todo lo contrario ocurría con la gente de River Plate, que hasta hoy me odia. Mis declaraciones en la semana del clásico siempre despertaban las pasiones. Tuve la suerte de ganar en la mayoría de los clásicos, salir campeón con Boca, manteniendo el invicto durante muchísimos partidos, gracias al excelente grupo de jugadores que conformaban el plantel en ese momento", relata.
Roberto Cabañas, como pocos en el mundo, tuvo el privilegio de jugar con los dos grandes del futbol mundial. En el Cosmos de Nueva York con el rey Pelé y en Boca Juniors con Diego Maradona. Al ser consultado sobre las características de ambos jugadores y la discusión en torno a quién de ellos fue el mejor de todos los tiempos, Cabañas apunta al argentino por su calidad futbolística y al brasileño de ser una excelente persona, además de magnífico jugador.
"A mi criterio, como futbolista y respetando lo profesional, Maradona fue el mejor del mundo. Pelé, además de ser excelente jugador, es una excelente persona y con mucha humildad, por eso sigue manteniendo su fama. Son jugadores muy diferentes y como personas también".
Selección paraguaya
Respecto a la Selección paraguaya, expresó sus dudas sobre la posible clasificación al próximo mundial. Dijo que lamentablemente a Chiqui Arce le ha tocado un grupo de jugadores en baja, con muchos lesionados y futbolistas que ya no están en condiciones de brillar en la Albirroja. "El técnico tampoco tiene una generación de nuevos futbolistas que pueda sustituir a los que actualmente están en el plantel. Los rivales directos como Colombia, Ecuador, Chile pasan por un buen momento y han sumado varios puntos; a la hora de definir, los resultados registrados en las dos primeras fechas y que fueron desfavorables para la Albirroja pueden ser decisivos en estas eliminatorias", analiza.
Según Cabañas, en la actualidad del futbol paraguayo no surgen estrellas y todos los jugadores están en un mismo nivel. Reiteró que al Chiqui Arce le toca una misión muy difícil y que esperaba que los integrantes del plantel albirrojo puedan recuperar su nivel y hacerlo antes de que sea muy tarde.
Fórmulas para triunfar
La exfigura del futbol paraguayo instó a los jóvenes que gustan del fútbol a ser responsables, disciplinados y perseverantes en sus sueños.
"La carrera del futbolista es un proceso. Es muy fácil llegar, pero difícil mantenerse. Cuando uno toma como profesión al fútbol, siempre tiene que tratar de mejorar; el que sale adelante es porque está mentalmente preparado", aconseja antes de agregar que "vio fracasar a miles de futbolistas con mucha calidad, con mucho talento, pero quizá no estaban preparados para el triunfo. Creo que el futbolista nace, se hace después y se perfecciona día a día. La carrera del futbolista es corta, pero da muchas satisfacciones y hay que aprovecharla al máximo", finaliza el pilarense.
La arenosa calle Colón, en la ciudad de Pilar, vio nacer la historia de este excepcional futbolista. "Jugaba en la arena con mis hermanos y amigos de infancia. Como éramos muy pobres, nuestra pelota era de trapo o utilizábamos frutas de naranja y limón", recuerda.
Radicado actualmente en Cali, Colombia, y casado hace 16 años con Tatiana Zawadzky, una hermosa exmodelo y reina de belleza colombiana, llegó al Paraguay tras observar la Copa América en Argentina.
Negocios
Cabañas, actualmente dedicado a actividades empresariales, sigue vinculado al fútbol a través de dos de sus hijos. María Antonia, de 8 años, y Daniel, de 13, que entrena en la filial del Barcelona en Buenos Aires y en la Selección paraguaya Sub 13. Según Roberto, además de un físico privilegiado, tiene una técnica perfeccionada, con grandes posibilidades de triunfar. Manifestó que los dirigentes del afamado club español ya deseaban adquirir su pase, pero él estimó que era necesario esperar un poco más. "Como padre y paraguayo, me encantaría verle jugar por nuestra Selección, pero esa será una decisión de Daniel, quien deberá nacionalizarse para hacerlo", aclara.
Rememora que en su caso fue un torneo estudiantil el que le abrió las puertas al éxito. Roberto tenía 14 años cuando lograron un título nacional con la Selección de la ciudad de Pilar. "Ganamos el torneo y me consideraron el mejor jugador".
A esa edad debutó en la Primera de Capitán Bado, marcando dos goles al clásico rival, América. Jugó en el club pilarense un año más y con 15 años fue a préstamo al Mariscal López, de Alberdi, entidad que le dio la posibilidad de mostrarse ante los grandes de la capital.
"Jugamos contra Sol de América, Olimpia y Cerro Porteño, y hasta le convertí un gol a (Roberto) Gato Fernández", acota. Esto llamó la atención de los dirigentes de fútbol asuncenos y los de Cerro Porteño manifestaron la intención de adquirir su pase.
"Las gestiones fueron muy difíciles, ya que el Capitán Bado pedía mucho por mí en ese momento. Pedir 2.000.000 de guaraníes en esa época (año 1975) era una suma demasiado importante por un desconocido futbolista pilarense", resalta.
Finalmente, los azulgranas hicieron un esfuerzo del que no se arrepintieron. Seis meses después, los de Barrio Obrero transferían a Roberto al Cosmos de Nueva York, con la cotización más alta registrada en ese entonces por la venta de un futbolista paraguayo, 850 mil dólares americanos.
Carrera futbolística
Entre los hechos que marcaron su vida deportiva, Cabañas recuerda el abrazo de Pelé al recibirlo en el Cosmos. "Era un sueño estar con el rey del fútbol". Posteriormente, quedó impresionado por el cariño de la hinchada del Boca Juniors, en Argentina, que lo tenía como uno de sus máximos ídolos. Roberto Cabañas fue campeón y goleador con el club más popular de la Argentina. "La gente de Boca me adoraba y hasta hoy me respeta, porque yo era el tipo de jugador que gustaba a la hinchada. Todo lo contrario ocurría con la gente de River Plate, que hasta hoy me odia. Mis declaraciones en la semana del clásico siempre despertaban las pasiones. Tuve la suerte de ganar en la mayoría de los clásicos, salir campeón con Boca, manteniendo el invicto durante muchísimos partidos, gracias al excelente grupo de jugadores que conformaban el plantel en ese momento", relata.
Roberto Cabañas, como pocos en el mundo, tuvo el privilegio de jugar con los dos grandes del futbol mundial. En el Cosmos de Nueva York con el rey Pelé y en Boca Juniors con Diego Maradona. Al ser consultado sobre las características de ambos jugadores y la discusión en torno a quién de ellos fue el mejor de todos los tiempos, Cabañas apunta al argentino por su calidad futbolística y al brasileño de ser una excelente persona, además de magnífico jugador.
"A mi criterio, como futbolista y respetando lo profesional, Maradona fue el mejor del mundo. Pelé, además de ser excelente jugador, es una excelente persona y con mucha humildad, por eso sigue manteniendo su fama. Son jugadores muy diferentes y como personas también".
Selección paraguaya
Respecto a la Selección paraguaya, expresó sus dudas sobre la posible clasificación al próximo mundial. Dijo que lamentablemente a Chiqui Arce le ha tocado un grupo de jugadores en baja, con muchos lesionados y futbolistas que ya no están en condiciones de brillar en la Albirroja. "El técnico tampoco tiene una generación de nuevos futbolistas que pueda sustituir a los que actualmente están en el plantel. Los rivales directos como Colombia, Ecuador, Chile pasan por un buen momento y han sumado varios puntos; a la hora de definir, los resultados registrados en las dos primeras fechas y que fueron desfavorables para la Albirroja pueden ser decisivos en estas eliminatorias", analiza.
Según Cabañas, en la actualidad del futbol paraguayo no surgen estrellas y todos los jugadores están en un mismo nivel. Reiteró que al Chiqui Arce le toca una misión muy difícil y que esperaba que los integrantes del plantel albirrojo puedan recuperar su nivel y hacerlo antes de que sea muy tarde.
Fórmulas para triunfar
La exfigura del futbol paraguayo instó a los jóvenes que gustan del fútbol a ser responsables, disciplinados y perseverantes en sus sueños.
"La carrera del futbolista es un proceso. Es muy fácil llegar, pero difícil mantenerse. Cuando uno toma como profesión al fútbol, siempre tiene que tratar de mejorar; el que sale adelante es porque está mentalmente preparado", aconseja antes de agregar que "vio fracasar a miles de futbolistas con mucha calidad, con mucho talento, pero quizá no estaban preparados para el triunfo. Creo que el futbolista nace, se hace después y se perfecciona día a día. La carrera del futbolista es corta, pero da muchas satisfacciones y hay que aprovecharla al máximo", finaliza el pilarense.