Cargando...
Harms dijo que la reunión que tendrán el miércoles será sobre todo para escuchar las razones que existen para impulsar el juicio político a cuatro miembros de la Corte y al ministro del TSJE Alberto Ramírez Zambonini.
Apuntó que en la conversación que tuvieron en la Cámara de Diputados los 45 diputados colorados, se había hablado de la renovación total de la Corte Suprema y que luego el Comité Ejecutivo del partido planteó la salida de cuatro ministros y agregó al ministro del TSJE. Harms dijo que en el Comité Ejecutivo, los representantes del sector interno que lidera Zacarías Irún también votaron en ese sentido, por lo cual los diputados querían escuchar los fundamentos de esa decisión de boca del líder del movimiento.
El legislador apuntó que nadie está cerrado en una posición, pero que esperan escuchar argumentos convincentes, dado que no existe un mandato imperativo para los diputados.
Al respecto, señaló también que esperaban que en la nota que remita la Junta de Gobierno a los diputados colorados recomendando apoyar el juicio político también se expresen las causales y que estas sean sólidas.
Harms destacó que realizar cambios en un Poder del Estado es una cuestión muy seria y la decisión debe estar bien fundamentada, ya que no puede ser simplemente por cuestiones de simpatía o, peor aún, que algunos quieran aprovechar la situación que se dio con el asesinato del periodista Pablo Medina para colocar a “su” gente en la Corte.
El legislador dijo que no podía asegurar que habrá una postura única y no descartó que se liberen los votos. También dijo esperar que todos los diputados colorados mantengan una postura coherente.
Rechaza amenazas
Por otro lado, el diputado Harms rechazó la “amenaza” realizada por el senador Juan Carlos Galaverna, en el sentido de que si los legisladores no acataban la decisión de la Junta de Gobierno podían ser sancionados.
Apuntó que esa posibilidad no está contemplada en el estatuto y que la Constitución establece claramente que es una atribución exclusiva de los diputados como acusadores y de los senadores como juzgadores.
Señaló que el partido puede recomendar una postura a sus legisladores, pero jamás ordenarles ni amenazarlos, ya que estamos en un régimen democrático.
Harms dijo desconocer por qué Galaverna se toma atribuciones y se comporta “como si fuese Napoleón o el dueño del partido”. Consideró que en algún momento se debe dar cuenta de que la ANR es un partido democrático y una asociación de hombres libres.