Cargando...
A la terrible inundación que sufren los pobladores de Alberdi, ahora se suma otra preocupación: la instalación de la planta procesadora de uranio en Formosa.
Lo más grave de todo esto es que “poco o nada” es lo que saben al respecto, comentó Miguel Fretes, comunicador de la radio local Boquerón. Diariamente, reciben allí numerosas llamadas en las que se reclaman mayor información y claridad de los datos, dijo.
“Todos hablan de que podría acarrear todo tipo de problemas para la población. Por ahí también se habla de que podría contaminarse el río Paraguay”, manifestó el locutor.
De hecho, sienten que es poco el interés que las mismas autoridades formoseñas demuestran debido a que ni siquiera se invitó a los alberdeños a la audiencia pública realizada ayer, en la que se presentó el estudio de impacto ambiental del proyecto y se escucharon a representantes de diferentes organizaciones e instituciones involucradas.
Hasta el momento, toda la información que se maneja es la que proveen los diarios, dijo. “Hay muy poca información, hay mucha gente que reclama. Se habla incluso de que puede afectar unos 100 kilómetros a la redonda”, manifestó.
Por su parte, la intendenta de Alberdi, Mabel Gamarra, coincidió en que la falta de información y el temor sobre los efectos que pueda traer la planta son las constantes entre los pobladores de la ciudad.
Ante los reclamos, pidieron a sus pares formoseños información oficial para tranquilizar a la gente. Este pedido hasta el momento no ha sido respondido, dijo.
Lo que “se sabe”
El comunicador repasó los pocos puntos que hasta ahora saben acerca del plan de instalación de la planta, que según la empresa Dioxitek, se dedicará al procesamiento de uranio mediante procedimientos químicos.
Sin embargo, a pocos kilómetros de donde se instalaría la factoría, solamente conocen pocos detalles, reclamó Fretes.
Escucharon que la planta podría afectar no solamente a Formosa y a Alberdi, sino también a la ciudad argentina de Clorinda y a Asunción.
Dijo que “todos hablan” de que la planta que la empresa tiene en Córdoba se va a cerrar y, por lo tanto, se mudarán a Formosa.
Otra preocupación tiene que ver con el hecho de que el límite entre Paraguay y Argentina en este punto está determinado por el río Paraguay. Fretes dijo que la actividad que desarrollaría esta compañía, teniendo en cuenta las características que hasta ahora se le atribuyen, podría significar contaminación de las aguas del río.
Por otro lado, criticó que es claro que quienes promueven todo esto son las mismas autoridades del Gobierno de la provincia, que son afines al oficialismo en Argentina, dijo.
Posición de Paraguay
Durante la audiencia pública realizada ayer en el salón Galpón G de la costanera formoseña, el senador liberal y extitular de la Comisión Nacional de Defensa de los Recursos Naturales (Conaderna) del Senado, Fernando Silva Facetti, dijo que en Paraguay no se permitirá que se lleven adelante proyectos que puedan perjudicar eventualmente a la población paraguaya, especialmente a las ciudades del departamento fronterizo de Ñeembucú, como Alberdi.
Durante su exposición en la audiencia, reclamó todas las veces que desde la Cámara Alta y desde otras instancias del Gobierno pidieron información oficial sobre el plan a Argentina y los posibles peligros que esto implicaría, pero que aun así fueron pocas veces respondidos.
Los representantes de la Gobernación de Formosa se defendieron diciendo que no está definido si se desarrollará o no el plan, ya que ellos son los encargados de otorgar la licencia ambiental para cualquier obra que se quiera desarrollar.
“Hasta ahora no está nada definido”, manifestó el subsecretario de Recursos Naturales, Ordenamiento y Calidad Ambiental de dicha gobernación, Hugo Eduardo Bay.
Posibles efectos
Otro de los disertantes en audiencia fue el biólogo y activista Raúl Montenegro, quien habló de los posibles efectos que la planta procesadora de uranio en la ciudad argentina podría causar a Paraguay.
La seguridad es un tema que no se puede dejar de mencionar cuando hablamos de productos radiactivos, dijo. Tanto en el traslado de los desechos como en el caso de que ocurriera alguna tragedia en la planta, las ciudades paraguayas cercanas serían afectadas, dijo.