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El ministro consejero Víctor Casartelli señaló a su llegada al país que una de las preocupaciones que se tenían al ser notificados de la expulsión de los diplomáticos paraguayos por parte de funcionarios de la cancillería venezolana fue la situación en que quedarían unos 310 estudiantes paraguayos que están becados allá, haciendo estudios universitarios. “Son los que más frecuentemente concurren a la embajada, para la renovación de pasaportes”, indicó Casartelli, quien mencionó que los mismos están estudiando en el sistema proveído por la “Fundayacucho”.
¿Formación o ideologización?
Buscamos en internet qué es la “Fundayacucho” venezolana y encontramos que se trata de la abreviación de una fundación cuyo nombre completo es “Gran Mariscal de Ayacucho”, una institución adscripta al Ministerio del Poder Popular para Ciencia, Tecnología e Innovación (MPPCTI).
“La orientación fundamental de la gestión de Fundayacucho es democratizar el ingreso a la educación universitaria -indica su página web- por medio de la asistencia económica de estudios de pregrado y posgrado”.
Más adelante, manifiesta que “con la llegada del gobierno bolivariano en 1999, se impulsó una rigurosa política para cambiar la concepción de Fundayacucho como entidad bancaria que mantenía a Fundayacucho (sic) como una institución que otorgaba créditos. Desde entonces, se privilegia la atención a los estratos sociales que durante décadas fueron menos favorecidos por los gobiernos de turno. Asimismo, la Fundación “se ha convertido en una institución de gestión social inspirada en la ética socialista”.
El programa de becas lleva el nombre de Luis Zambrano, inventor del pueblo para el pueblo, se indica también entre la misión de las becas Fundayacucho.
“Fundayacucho avanza hacia la consolidación del poder popular, implementando novedosos mecanismos de participación que reconocen a las entidades organizadas como entes generadores de saberes, de propuestas, de proyectos y de experiencias, capaces de asumir responsabilidades de gestión de políticas públicas en función de sus necesidades”, resalta también la página mencionada.
Respecto a los estudiantes extranjeros, indica que 92 nuevos jóvenes llegaron de la “Patria Grande” en octubre, para formarse en ámbitos como docencia agropecuaria, construcción civil, agroalimentación, procesos químicos, comercio internacional, gestión tecnológica del deporte, enfermería y actividad física y salud, entre otras. También indica que 175 estudiantes internacionales estudian Medicina Comunitaria en la Escuela Latinoamericana de Medicina Dr. Salvador Allende.
Funcionario quedó a cargo
Derlis Paredes se llama el funcionario técnico administrativo que quedó a cargo de atender a los connacionales que requieran algún servicio consular, según informó ayer Víctor Casartelli. El diplomático señaló que los venezolanos dieron su conformidad para que este funcionario, no diplomático, se ocupe de eventuales necesidades consulares para enviar documentos al Paraguay o a la Embajada paraguaya más cercana a Venezuela, ya que el encargado no ejerce funciones diplomáticas y no puede firmar documentos, pero sí procesará lo que se necesite. La Embajada paraguaya permanecerá a su cargo hasta tanto la Cancillería confirme qué país amigo podría tomar la “protección” de los bienes paraguayos.